La campaña especial de control del consumo de alcohol y drogas entre los conductores, desarrollada por la DGT en las carreteras de la provincia de Huelva entre los días 14 y 20 de julio, ha dado como resultado 63 positivos, lo que supone el 2,6% de los 2.412 conductores sometidos a las pruebas de alcoholemia en ese plazo. Asimismo, de los 15 conductores sometidos al test salival para comprobar la presencia en el organismo de drogas, ocho resultaron positivos (el 53%).

Esta campaña intensiva de vigilancia del consumo de alcohol y drogas al volante se ha desarrollado en paralelo a los dispositivos especiales de regulación y vigilancia del tráfico que la DGT lleva a cabo durante los meses de verano. Un dispositivo que tiene como principales objetivos facilitar los desplazamientos a las playas, reducir los riesgos de accidentes y tratar de evitar o, al menos, minimizar las retenciones que se producen en las vías con mayor circulación, especialmente los fines de semana y festivos. Sólo en desplazamientos de largo recorrido, la DGT prevé 1.596.000 por las carreteras de la provincia en los meses de julio (769.000) y agosto (827.000).

Está previsto que a lo largo de todo el verano se establezcan, como medida preventiva, Puntos de Verificación de Alcoholemia y Drogas, algunos de los cuales se programan de manera coincidente con la celebración de eventos excepcionales, como romerías o fiestas patronales.

Además de esta campaña especial de control del consumo de alcohol y drogas entre los conductores, entre el 18 y el 24 de agosto se realizará una campaña intensiva de control de velocidad en la que se pondrá especial interés a la circulación en carreteras secundarias, vías donde se producen la mayor parte de los accidentes mortales y que son más transitadas en esta época del año.

La labor que desempeña los agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil es imprescindible para llevar a cabo estas campañas de control y vigilancia en las carreteras onubenses, en la que también participan de forma activa policías locales de la provincia.

Conducir después del consumo de sustancias psicoactivas es un hecho frecuente en España, alcanzando a doce de cada cien conductores, tal y como muestran los resultados del Proyecto europeo Druid'13 (Driving Under Influence of alcohol and Drugs), proyecto que estudia la prevalencia de consumo de alcohol y drogas entre los conductores. Además, la memoria que anualmente realiza el Instituto Nacional de Toxicología sobre una muestra de fallecidos en accidente de tráfico constata que en 2013 cuatro de cada diez conductores fallecidos en accidente de circulación resultaron positivo en sangre a drogas y/o psicofármacos y/o alcohol.

Un guardia civil de Tráfico realiza un control de alcoholemia en Aljaraque.