josé fiscal delegado del gobierno andaluz en huelva

"Si en Tarragona no hay conflicto con el Polo, en Huelva no tiene por qué haberlo"

  • El delegado ha visitado Cataluña para conocer una relación industria-ciudad "muy cercana" Afirma que los onubenses "quieren a la industria, pero piden esfuerzos en medio ambiente"

Recién pasado el ecuador de la legislatura, el delegado del Gobierno andaluz, José Fiscal, hace un balance positivo pero marcado por la situación económica. "Se ha hecho un esfuerzo titánico por mantener los pilares del Estado del Bienestar", asegura. La asignatura pendiente ahora es la misma que en años anteriores, el empleo, "reducir los índices de paro, absolutamente inaceptables, que hay en la provincia de Huelva y Andalucía". En ese balance avala también el resultado del pacto de gobierno con Izquierda Unida, en la cuerda floja durante 48 horas (la entrevista se realizó antes de la resolución de la crisis).

-El pacto de Gobierno con IU pasa por un momento complicado. ¿Cómo lo valora?

-Hasta ahora, en términos generales, ha ido bastante bien y desde luego en la provincia de Huelva no ha habido grandes sobresaltos. Hemos trabajado y trabajamos conjuntamente sin especiales dificultades. Somos dos organizaciones distintas, no somos lo mismo, y eso está clarísimo, pero ha habido muy buena sintonía con los representantes de la oficina de la Vicepresidencia. Con los consejeros cuando han venido a Huelva hemos actuado con mucha lealtad, se informa de lo que se hace. Y con Diego Valderas tenemos una relación francamente fluida. Hablo con Valderas no menos de dos veces a la semana. Que ha habido alguna tensión, pues sí, no me voy a abstraer de lo que ha pasado.

-¿La cercanía electoral está tensando las relaciones?

-Cuando tenemos en un horizonte tan cercano unas elecciones es verdad, y es legítimo y comprensible, que todas las fuerzas políticas intenten singularizar su mensaje, que la gente vea muy claro qué proponen el PSOE e IU. Tensar o no, pues no lo sé, pero que cada uno haga hincapié en su propio mensaje creo que es algo comprensible y razonable.

-En Huelva sí hubo un momento de discrepancia, cuando la Consejería de Fomento anunció que estaba revisando las obras de las viviendas del Torrejón. ¿Se ha resuelto ese procedimiento?

-Me remito a lo que la propia consejera dijo, que se estaba revisando porque se estimaba que había algunas cuestiones que eran mejorables y que desde luego la máxima prioridad es que se reanuden las obras del Torrejón. ¿Que eso provocó tensión? Es lógico el interés de todas las partes de ver qué pudo pasar ahí. Pero eso ocurre con relativa frecuencia, semanalmente a ayuntamientos de toda Andalucía se le piden reintegros de subvenciones porque no han ejecutado la obra para la que eran. Pero creo que sigue habiendo una sintonía importante. La semana que viene, por ejemplo, vamos a tener una reunión con los vecinos del Torrejón la delegada y yo. En todo este tiempo hemos repetido que somos un solo Gobierno, formado por dos partidos pero un solo Gobierno.

-Los nuevos sensores que se han instalado, ¿podrán determinar concretamente el origen de los malos olores en la ciudad?

-Hay que decir una cosa importante: en lo que va de año ha habido un episodio importante, el 12 de enero. Es decir, como he dicho hasta la saciedad: afortunadamente y gracias al esfuerzo de la administración y de la industria esto no es lo que era en los años 70. Pero no nos conformamos, trabajamos para que esto no se dé nunca. De ahí las reuniones que hemos mantenido con la industria y el esfuerzo que se le solicitó y que acogió de buen grado. Vamos a seguir trabajando.

-¿La consecuencia última de estas mediciones será pedir a las instalaciones afectadas que actúen sobre sus emisiones?

-Este dispositivo es para caracterizar de dónde vienen las emisiones. La idea es que se produzca cada vez menos. ¿Cómo? Ahora mismo no estoy en disposición de decirlo. Además hay que recordar que incluso ese día, a pesar de que la alerta en la población estaba justificada, nuestros sensores no recogieron emisiones por encima de lo permitido. Estos temas llevan tiempo. Lo que sí es cierto es que a la Junta no se le puede acusar de que esté mirando para otro lado. Hay que hacer una labor informativa importante porque hay quizás entre la ciudadanía cierto desconocimiento de esta realidad, hay que informar más y probablemente mejor.

-Precisamente la falta de comunicación es una de las críticas en torno a la actividad industria. Como periodista, ¿cree que las empresas no han comunicado suficientemente?

-Yo tengo que hablar por la Junta. La Junta tiene una relación muy estrecha con la industria y creo que hay que hacer un esfuerzo general para informar mejor de lo mucho y bien que se está haciendo. Si no fuese por ello no habríamos llegado a esta situación.

-Hace unas semanas aseguró que la situación parecía haber mejorado tras el episodio del 12 de enero, que las industrias parecían haber actuado. ¿Tiene constancia de alguna medida concreta para ello?

-Se trabaja continuamente, técnicos de medio ambiente trabajan con los de las industrias. Y no ha habido ningún acontecimiento como el del día 12 de enero. Pero afirmar algo tan rotundo de un día para otro sería arriesgado. Yo creo que el interés mayoritario de la ciudadanía es que la industria continúe siendo importante para Huelva, pero al tiempo pide que se sigan haciendo esfuerzos en materia medioambiental.

-Acaba de visitar Tarragona, el gran polo químico de España. ¿Qué impresión o ideas trae sobre su funcionamiento y su integración en la sociedad?

-La sensación que me traje es que las relaciones industria-ciudad en Tarragona son muy cercanas, fluidas y no hay conflicto. Y si en Tarragona no lo hay, en Huelva no hay ninguna razón objetiva para que lo haya. Vamos a mantener una reunión después de Semana Santa con la industria y ver qué se puede hacer. En Tarragona hay muchas cuestiones que son idénticas a las de Huelva, pero, por ejemplo, la montaña rusa de Port Aventura está a 200 metros del Polo Químico. Si eso es así, ¿por qué aquí hay quien estima que la industria es incompatible con otros tipos de desarrollo? Si allí es compatible, ¿por qué no aquí?

-¿Y cuál es su diagnóstico sobre el origen de esa diferencia?

-Mi primer diagnóstico es que allí se ha explicado mejor la importancia que tiene la industria para la economía del territorio.

-En Tarragona existen los paneles públicos asesores, grupos de ciudadanos que aportan su opinión y experiencias a las industrias. ¿Podría copiarse esa idea?

-Por ejemplo, ¿por qué no?

-¿Y la impulsaría la Junta?

-No veo por qué no. Ya veremos. Vamos a iniciar un trabajo.

-¿Hay una resolución ya para el expediente a Fertiberia por no haber presentado el proyecto de restauración?

-Todavía no, le queda poco.

-Según se anunció hace unos días, ese proyecto ya está redactado. ¿Van a exigir la restauración de las balsas?

-La restauración de las balsas le compete a una empresa sobre un terreno que es del Estado y obedece a una denuncia que pone el Gobierno central. Nosotros somos competentes sólo sobre que el proyecto de restauración se ajuste a las normas medioambientales. El Gobierno tendrá algo que decir.

-¿Pero la Junta ha reclamado oficialmente al Gobierno que actúe?

-Sí lo ha hecho, me consta que la Consejería lo ha hecho.

-¿Y no ha tenido respuesta?

-Que yo sepa, hasta el momento no.

-¿Qué opinión le merece la mesa de diálogo aprobada en el Ayuntamiento de la capital?

-Todo lo que sea aunar esfuerzos me parece bien. Éste debería ser un asunto importante en el que todo el mundo estuviéramos de acuerdo. Y creo que la declaración institucional aprobada en el Ayuntamiento va en ese sentido.

-Una vez que hay un proyecto de restauración, ¿abrir un diálogo sobre cómo restaurar las balsas no supondrá retrasar el proceso?

-No, las balsas hay que restaurarlas y trasladar a la ciudadanía cómo se va a hacer. Ahí hay trabajo para mucho tiempo. También hay que decidir en el futuro qué se hace ahí.

-¿No tiene mucho de electoralista esta propuesta?

-Creo que no, y si lo tiene lo tiene para todo el mundo. Nadie se tiene que beneficiar especialmente de esta situación.

-La Autorización Ambiental Unificada de la mina de Riotinto establece una serie de condiciones que van a elevar el coste del proyecto. ¿No habrá problemas para que lo desarrolle Emed?

-Espero que no. Nosotros queremos minas del siglo XXI con todas las garantías económicas, sociales y ambientales y la AAU claramente va en ese sentido.

-El futuro de la Corta Atalaya queda en el aire. ¿La Junta ha renunciado a recuperarla?

-No, no ha renunciado. De ninguna manera. Pero es un asunto complejo en el que todo el mundo tiene que hacer un esfuerzo. La AAU ha costado mucho trabajo sacarla, los técnicos han echado muchas horas en elaborarla, y creo que la Junta ha hecho un excelente trabajo. Ahí está, la mina ya tiene todo lo que tenía que tener para iniciar la vuelta a la actividad.

-¿El proyecto CEUS obtendrá pronto el interés autonómico?

-En el proyecto CEUS lo más importante y lo que más ha costado fue la prevalencia del interés científico y tecnológico sobre el uso forestal y eso se consiguió. Y se está trabajando; la prueba de que va adelante es que los ayuntamientos de la zona están mostrando su interés en reunirse con los responsables. Estoy seguro de que el proyecto CEUS será una realidad y Huelva va a tener un lugar en la aeronáutica mundial.

-El Parque Científico de Aljaraque no termina de arrancar. ¿Tienen prevista alguna acción al respecto?

-Es verdad que ha empezado a andar en los momentos en que la crisis nos ha golpeado con más fuerza y eso lo ha complicado. Pero desde luego hay un compromiso firme de la Junta con el PCTH para seguir priorizándolo y conseguir más pronto que tarde el éxito del parque.

-¿No fue un error crear dos parques, uno en Huelva y otro en Aljaraque?

-Más que un error prefiero verlo como una oportunidad. Son distintos. Aquello empezó como un polígono agroalimentario. Éste es un parque más destinado a la investigación. Deberían ser compatibles y complementarse. Dicho esto, en honor a la verdad, no podemos decir que ninguno de los dos sean un éxito.

-¿Empezará la Junta alguna de las obras pendientes este año?

-Hay obras en marcha en los puertos. Y sé que se trabaja denodadamente para reanudar las del Torrejón. También están en marcha un gran número de obras hidráulicas, por valor de 70 millones de euros, y en licitación otro tanto. Ahora bien es verdad que la coyuntura económica es muy difícil y todo el gobierno está de acuerdo en que ahora mismo hay una prioridad, que es garantizar el Estado del Bienestar. Y las obras más importantes en materia de infraestructura dependen del Gobierno central.

-Las grandes obras, como la autovía de la Cuenca Minera o la Ciudad de la Justicia, quedan entonces aparcadas.

-La Ciudad de la Justicia está aparcada, lo ha dicho el consejero, pero aunque no se puedan poner ladrillos se puede hacer el trabajo administrativo previo para el momento en el que se pueda iniciar la obra. Hay una realidad incuestionable: nosotros deberíamos haber recibido 1.200 millones de euros más del Gobierno central de lo que hemos recibido. Nosotros tenemos el pie en el cuello del Estado, y otras comunidades no lo tienen. Yo no entiendo por qué Andalucía no tiene un plan de empleo especial y otras comunidades sí.

-Entonces de la rehabilitación del Banco de España mejor ni hablar.

-Desde luego la intención es recuperarlo, se hacen trabajos y estudios, pero no voy a engañar a nadie: a un corto plazo no se va a hacer, porque no hay disponibilidad. Pero no renunciamos a eso ni a recuperar el edificio de Hacienda.

-¿Hay algún plazo para abrir el centro hospitalario de alta resolución de Lepe y retomar las obras en Aracena?

-Sobre el de Lepe, la consejera ya anunció que parte del préstamo del Banco Europeo de Inversiones iría para ahí. Ahora bien, quedan los accesos y eso corresponde al Ayuntamiento. El de Aracena ahora mismo no hay presupuesto para terminarlo pero con certeza será el siguiente. No vamos a renunciar a él de ninguna manera.

-¿El chare del Condado queda descartado?

-No está descartado, pero no hay nada de él. A corto o medio plazo no, pero está en la planificación y eso es lo importante.

-Hay una denuncia del PP y el PA de Nerva sobre una subvención autonómica que llegó al Ayuntamiento y cuyo destino no está claro. ¿Se está investigando?

-Hay repartidos por toda la geografía andaluza ayuntamientos de todos los colores en los que se han concedido subvenciones para determinadas obras y por algunas circunstancias la actuación no se hace. Entonces, automáticamente se pide el reintegro. Es una cuestión administrativa; si en Nerva es así, la Junta actuará como en el resto de los ayuntamientos.

-Los regantes han llevado ante el juez el plan hidrológico del Tinto y amenazan con llevar el de la Corona Norte para pedir más agua. ¿Se podrían renegociar las cantidades?

-La cantidad de agua concedida está por encima de la que se consume ahora mismo, es decir, que permite un crecimiento. ¿Que quieren más? Lo respeto.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios