El cuerpo de bomberos de la capital ha viajado recienteme a Béjar (Salamanca) para efectuar una simulación catastrófica con el fin de enseñar a sus compañeros salmantinos y bejeranos ejercicios útiles ante una situación de terremoto.

El simulacro consistió en una actividad ininterrumpida desempeñada a lo largo de unas 30 horas, en la que participaron todas las áreas del Grupo de Intervención de BUSF (Bomberos Unidos): unidad canina, unidad médica, equipos de descombro, unidad de logística y potabilización. En total, ejecutaron los trabajos 80 rescatistas del BUSF y 10 profesionales de la zona anfitriona.

Ante sucesos como los acaecidos en Lorca, Murcia, donde se obtuvo un balance negativo con importantes pérdidas humanas y materiales, con las maniobras realizadas pretendieron que Béjar participase de una forma activa. Y que lo hiciera a través del establecimiento de un gabinete de crisis conformado por todos los cuerpos y fuerzas de seguridad existentes en la ciudad, así como todos los equipos externos desplazados para la ayuda de emergencia tales como 061, UME, ONU, Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil, GRS o Bomberos; la identificación de zonas afectadas y coordinación, junto con los responsables de instituciones externas de salvamento; la puesta en funcionamiento de los planes de evacuación de centros de alta ocupación como los hospitales o las dependencias municipales; la planificación de centros de acogida de desplazados; o los planes de acopio de emergencia.

Este tipo de acciones, cada día van comprendiendo una mayor importancia entre la sociedad y protección civil. Están orientadas a disminuir los posibles efectos causados por un terremoto. De esta manera, ante situaciones reales, la experiencia previa permite que no sea complicado poner en marcha todo los protocolos de intervención y seguridad, así como establecer un entorno de trabajo en equipo con el propósito de que los voluntarios se conozcan entre sí y compartan experiencias pasadas. Todo ello hará posible la realización de tareas más eficientes.

Huelva ya contó años anteriores con simulacros similares vinculados con salvamento, unidad canina y descombro pero nunca llegó a contar, hasta ahora, con una simulación como la que vivieron los bomberos onubenses en la ciudad de Béjar. Según Antonio Rodríguez Nogales, delegado de Bomberos Unidos en Andalucía y responsable de la Unidad Canina de Rescate del Ayuntamiento de Huelva, "la puesta en marcha de los procedimientos y protocolos de intervención dio fruto a un desarrollo dinámico de todas las maniobras diseñadas. El balance no puede ser más positivo. Posibles ciudades ya están en mente para que vuelvan a albergar el simulacro, aunque aún es pronto para tener un escenario definido".