Acaba de aterrizar en el Decano. Al menos físicamente, porque su trabajo e influencia comenzaron hace algunos meses. Zoraída Rodríguez Vílchez, granadina y con una amplia experiencia en el deporte de élite, se vinculó hace unas semanas para reforzar una parcela por estrenar en el club. Sergi pidió apuntalar su cuerpo técnico. Quería afianzar la fortaleza mental de su vestuario. Puso su nombre sobre la mesa. No fue una apuesta casual. Ambos llevaban casi una temporada trabajando de forma discreta y estrecha. Al Recre líder la mente le funciona tan bien como las piernas. Hay mucho trabajo detrás.

-¿Le extraña que a estas alturas siga siendo noticia la contratación de un psicólogo en un club de fútbol?

-Aún nos queda mucho camino por recorrer. Además, la situación económica general del país no juega a nuestro favor. Hay que recortar por muchos sitios, y desgraciadamente, a la psicología aún no se le da el peso que merece. Por suerte, este club ha apostado por esta disciplina.

-El psicólogo sí que es un profesional habitual en muchas otras disciplinas, aunque siguen siendo vistos como novedosos en el deporte más profesionalizado de España.

-Es curioso, pero ha habido casos muy sonados de psicólogos en clubs que nos han hecho un flaco favor…

-Gran parte de los clubes de la Liga Adelante no cuentan con los servicios de un psicólogo para su primera plantilla. Si tuviera delante a sus responsables, ¿por qué deberían contar con uno?

-Porque no debemos olvidar que ante todo somos personas. Se les pide a los jugadores un nivel de competición altísimo durante toda la Liga, y dejamos a parte la influencia de los pensamientos, de las emociones, de la presión… Nunca debemos olvidar que también son humanos.

-¿Cuál es su labor el Recreativo?

-Aportar mi granito de arena a los jugadores y al cuerpo técnico para potenciar aquellas variables psicológicas que incidan en el rendimiento deportivo.

-Cuando un psicólogo entra en un grupo tan hermético como es un vestuario de fútbol, ¿cómo lo reciben?

-Hermético o no, eso depende de cada club y de cada vestuario. Mi acogida ha sido espectacular. Y eso es de agradecer. Lo agradezco.

-El trabajo psicológico tiene un componente sugestivo. Para que el resultado sea positivo uno debe creer y dejarse guiar y ayudar. ¿Qué ha percibido al llegar?

-No todo el mundo tiene por qué creer en la psicología y es normal que haya un porcentaje de personas que no estén tan receptivas a la labor del psicólogo, pero aquí no me he encontrado con esta situación. Todo el mundo parece muy abierto a coger lo que les pueda ofrecer y aunque aún es pronto, y nos queda mucho camino por recorrer, cada vez vamos trabajando en más aspectos y desde diferentes modalidades de intervención.

-¿Ha chocado en alguna ocasión con el criterio de un entrenador con respecto a tal o cual futbolista?

-No entro a juzgar personalidades, solo a valorar variables psicológicas que influyen en el rendimiento. Sí que en alguna ocasión hemos estado en desacuerdo, pero está claro que nunca hay una verdad absoluta y lo importante es que creo por encima de todo en la comunicación y siempre he podido sentarme a contrastar opiniones con los entrenadores con los que he trabajado.

-¿Recomendaría a un entrenador no alinear a un determinado jugador si no lo considera psicológicamente apto en ese momento para jugar?

-Jamás. Esas decisiones son del entrenador. Mi labor es, si hay algún problema en el plano psicológico, intentar solucionarlo lo antes posible con la ayuda del jugador. Además, mi trabajo se basa en la más absoluta confidencialidad y no voy al entrenador contándole de qué pie cojea cada uno. El jugador debe tener la suficiente confianza con su entrenador para decirle, igual que lo hace si tiene una molestia física, si no está listo psicológicamente para jugar por algún motivo.

-Usted llega al Recre de la mano de Sergi, con quien trabaja desde hace un año. ¿Cómo surgió?

-A nivel profesional, tengo relación con esta provincia y me llegó la noticia de que el club quería incorporar la figura de un psicólogo deportivo. Me reuní con Fernando Iturbe y después con Sergi en la pretemporada 2012-2013 y el trabajo gustó, pero finalmente no pudo ser. Con Sergi volví a tener contacto y empezamos a colaborar y trabajar juntos, de forma cada vez más frecuente hasta que finalmente ha llegado mi incorporación al club.

-¿Qué le pide Sergi?

-¡Qué haga mi trabajo! (risas) La relación es muy buena y vamos hablando de forma frecuente para ver cómo podemos encarar el partido, cómo gestionar diferentes situaciones, cómo motivar a los chicos, y ahora cómo trabajar esas variables psicológicas con el grupo, mentalización para afrontar el partido con las máximas garantías, no permitir que haya pensamientos negativos que nos hagan venir abajo en circunstancias adversas, que nos relajen o nos lleven a una falsa confianza, fomentar emociones que empujen en el partido (ambición, superación, tranquilidad y confianza), etc... Y ahora, de forma individual con los jugadores.

-¿Su trabajo es lineal y planificado atemporalmente o lo irá marcando la clasificación y el día a día?

-El día a día. Cada circunstancia nos demanda unas fortalezas psicológicas u otras.

-Ha trabajado con entrenadores de prestigio como Lucas Alcaraz y colaborado con otros. En comparación Sergi es un novato. ¿Cómo lo definiría? ¿Qué futuro le augura?

-No me gusta comparar ni hablar gratuitamente. Yo creo que Sergi tiene un gran futuro. Trabajador es y está muy abierto a absorber todo lo positivo que cualquiera le pueda aportar. Lo que tenga que llegar, llegará.

-¿Quién es mejor motivador?

-No me gusta comparar. Además, yo no creo que se pueda hablar nunca en términos absolutos. No es cuestión de quién es mejor motivador siempre, si no de si un entrenador tiene la capacidad o no para motivar cuando tiene que hacerlo o ser más rígido, o más flexible o lo que sea. Se llama liderazgo situacional e implica saber adaptarse a las circunstancias a las que te enfrentas, al equipo que tienes, y al jugador particular con el que estés tratando en cada momento.

-Usted llega a un Recre líder. ¿Qué necesidades tiene un equipo en la cresta de la ola? ¿Cuáles son los puntos a trabajar?

-No puedo especificar qué estoy trabajando directamente con la plantilla. Está claro que es una situación más cómoda que cuando entras a trabajar estando en zona de descenso, por ejemplo. Siempre hay variables que trabajar: las ganas de mejorar, crecer, superarse, ser más positivos, con más confianza, más fuertes mentalmente… Son aspectos que este equipo quiere trabajar.

-Ha tenido la oportunidad de trabajar con algunos equipos anteriormente. ¿Cómo definiría al actual Decano?

-Muy buen vestuario y buen cuerpo técnico. Por ahora todo parece apoyar y sumar.

-Mente y cuerpo forman un todo, pero en qué medida uno repercute sobre el otro.

-Ambos se retroalimentan, claro está. Pero si falla uno, a veces falla el otro. Hasta ahora solo atendemos al cuerpo y olvidamos la mente. Lo hacemos también todos en nuestra vida diaria. Nos da una contractura y vamos al fisio, pero si nos sentimos inseguros, desmotivados o tristes nos cuesta más ir al psicólogo. Tengo un artículo que se llama 'La vergüenza del cambio' en el que abordo esta idea. Parece que reconocer que tenemos un punto débil en la espalda no pasa nada, pero nos cuesta trabajo reconocer que no somos lo suficientemente fuertes mentalmente en algunas situaciones. Nos avergüenza reconocer que podemos estar tristes o sentirnos inseguros. Es como si un sentimiento puntual nos calificara por completo como personas, y generalmente, nos ponemos una etiqueta negativa por ello. Si en una situación puntual, tenemos miedo o nos sentimos inseguros, nos llamamos a nosotros mismos cobardes, en vez de percibir como normal que todos tenemos nuestros momentos y nuestras rachas. Cuando eres valiente y das el paso y buscas ayuda… Uf! Es que los beneficios son tantos... Uno decide en qué rueda se quiere meter: en la de crecimiento y la superación, o en la de pena y la inmovilidad.

-¿Qué grado de crecimiento puede aportar la mente a un futbolista?

-La del futbolista y cualquiera. Yo soy de las personas que creo que no tenemos límites más que los que nos marcamos nosotros mismos. Costará más o menos, habrá que luchar con más o menos circunstancias adversas, pero siempre hay una horquilla en la que podemos mejorar.

-En lo que va de campaña, este Recre fue capaz de remontar en varias ocasiones. ¿Fortaleza mental, argumentos futbolísticos o casualidad?

-Espero que poca casualidad. Pienso que hay que centrarse en lo que depende de uno y si no cogemos el control, no cambiamos ninguna circunstancia. Remontar es coger el control, es centrarnos en lo que depende de nosotros. Y de nosotros depende nuestro fútbol y nuestra mente.

-¿Está mentalmente preparado el Recre para afrontar la dureza de una Liga tan exigente con el ascenso como meta?

-Como he comentado, aún llevo poco tiempo. Pero para eso está mi trabajo, para aportar en ese campo lo que haga falta. De todas formas, no hablamos de metas a largo plazo, hablamos de partidos.

-De puertas para afuera el mensaje es de cautela. ¿La palabra ascenso es tabú dentro?

-Cuando miras tan a largo plazo, el norte se desvía. Hay que tener un camino, pues tenerlo te hace recorrerlo con más entereza, pero si olvidas qué paso tienes que ir dando cada día… Mal asunto.

-Además del trabajo con profesionales, usted tiene experiencia en el trabajo con la cantera. ¿Qué diferencias hay?

-Se pueden trabajar las mismas variables psicológicas, pero es verdad que en cantera es fundamental inculcar y trabajar valores inherentes en el fútbol y en el deporte: esfuerzo, compañerismo, solidaridad o el trabajo en equipo.

-¿Dónde hay que incidir en los niños?

-Cuando trabajo con niños me gusta mucho fomentar la confianza en ellos mismos. Además, es increíble lo rápido que lo absorben todo y como lo generalizan en su vida diaria.

-¿Se pueden corregir en la etapa formativa defectos que posteriormente lastran carreras deportivas?

-Es justo el momento. Fundamentalmente la humildad, el esfuerzo y tener los pies en la tierra. En todos los deportes es importante, pero en el fútbol tenemos la circunstancia de lo rápido que van algunas carreras deportivas y el cambio tan grande que puede haber de una categoría a otra.

-¿Qué papel juegan los referenes infantiles como Cristiano o Messi?

-Un ejemplo a seguir desde luego. Todo personaje público lo es y por eso es fundamental cuidar todas las acciones.

-¿Somos conscientes de la influencia que ejercen?

-Pues a veces no, imagino. Muchos padres los alaban y eso los niños lo ven. Lo que es fundamental no es solo alabar el éxito sino también recalcar el esfuerzo que han tenido que hacer para llegar ahí. Últimamente es un valor que a nuestra sociedad, creo que se le olvida.

-¿Se ve siendo la psicóloga de un Recre en Primera la temporada que viene?

-Si al equipo le pedimos ir paso a paso, yo no voy a ser diferente…. Es el sueño de todos.