El Gobierno andaluz mira a Madrid en el caso de los fosfoyesos negros, el material detectado en las balsas de las marismas del Rincón con una radiactividad hasta doce veces superior a la de los fosfoyesos normales. La Consejería de Medio Ambiente asegura estar esperando un plan de trabajo del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para que marque la actuación a desarrollar sobre las dos parcelas en las que se han detectado estos residuos, bien sea su restauración, bien la retirada de los residuos. Así lo aseguró ayer el titular del departamento, José Juan Díaz Trillo, quien además dijo que la existencia de estos residuos no retrasará la ejecución de la recuperación de las balsas de fosfoyeso, antaño marismas.

El consejero se refirió así al informe elaborado por la comisión de expertos encargada de supervisar el trabajo de Tragsatec para la restauración de las balsas de fosfoyeso. En ese informe, los especialistas advertían de la existencia de esos fosfoyesos negros (un material con tasas mucho mayores de radiación que los normales) y reclamaban la realización de estudios de caracterización del mismo, para enviarlos al CSN y que este organismo decida qué se debe hacer con este material. Asimismo, los expertos recomendaban marcar el espacio en el que se encuentra y restringir el acceso a las parcelas en la que se sitúan los residuos (la zona 3 de las balsas, inactiva desde hace años).

Díaz Trillo aseguró ayer que habrá que esperar a las conclusiones del informe del Consejo que "no tardarán mucho" y esa respuesta "marcará la pauta para que sean los expertos y la empresa encargada de llevar a cabo el proyecto de recuperación, restauración o traslado de vertidos la que tome en consideración esas conclusiones". La empresa Tragsatec, que realizó el estudio inicial en el que se detectaron los fosfoyesos negros, ha elaborado también un proyecto director para la recuperación de las balsas recién entregado al Ministerio de Medio Ambiente. Ahora habrá que redactar un proyecto de ejecución de la restauración de las balsas en sí mismo, que tardará unos meses en redactarse.