Vivir en Huelva

Noche blanca en La Palma

  • La proyección de un vídeo 'mapping' en la parroquia y la torre ofrece un espectáculo sin precedentes en la localidad

  • La gastronomía, el arte y el vino están muy presentes

La velada del viernes en La Palma del Condado fue de magia, diversión y encuentros. Y es que se celebró la VII edición de la Noche Blanca de la Cultura y el Vino, una actividad consolidada que saca a la calle a todos los palmerinos y que atrae a cientos de visitantes.

En esta ocasión, una de las actividades estrella fue la proyección de un vídeo mapping en la fachada de la parroquia y de la torre, que transportó a todos los presentes a un mundo de realidad paralela fascinante. La gastronomía de esta tierra y la gran apuesta en este sector que supone el proyecto europeo Sabor Sur, liderado por La Palma, y un guiño a esa reconstrucción de la iglesia y la torre, que están de aniversario, fueron la base sobre la que se proyectaron tres sesiones de mapping en un entorno privilegiado. Para muchos de los asistentes se trató de la primera vez que veían tal espectáculo, lo cual dejó boquiabiertos a muchos de ellos. El alcalde de La Palma, Manuel García, declaró que habían querido que la gente tuviera un buen recuerdo del mapping, que va a suponer "ver una fachada diferente de nuestra torre y de nuestra iglesia".

Las bodegas de La Palma, Millán, Garay, Infante, Rubio y la Cooperativa Nuestra Señora de Guía abrieron sus puertas para degustar vino y tapas en las que la base de las mismas era el vino palmerino. Esa misma característica se ha dado en los 16 bares que han participado en esta noche con tapas deliciosas regadas con caldos de la localidad. Todo el pueblo estuvo en pie en una noche en la que la magia de la Noche Blanca se repartió por cada rincón palmerino, llegando a cada bodega, las cuales se sitúan en puntos diferentes de la localidad.

Pero esta velada tan especial en La Palma fue mucho más: cante, baile, visitas a monumentos y un largo etcétera de actividades que tuvieron a la Plaza de España como epicentro de las mismas. De esta forma, en la calle de la música los alumnos del aula de piano pusieron a prueba los conocimientos adquiridos y se pudo observar una exposición de dibujos de alumnos de cuarto de primaria. La ermita del Valle y su torreón fueron testigos de entradas y salidas para visitar el edificio, de estilo mudéjar, más antiguo del municipio. En su torreón, la asociación cultural Desvariarte dio lecturas a poemas que todo el que llegaba escuchaba atento, en un lugar peculiar y con mucha historia. La torre y la parroquia, protagonistas en esta ocasión por su 250 aniversario, también tuvieron las puertas abiertas, con visitas guiadas. La Coral Municipal deleitó los sentidos con sendas actuaciones en los dos monumentos arquitectónicos.

Además, otra actividad novedosa fue la cata de vinos organizada por la asociación Amigos de los Vinos del Condado de Huelva, que dirigió Leopoldo Delea, y en el mismo lugar una exposición de fotografías estuvo de muestra durante la velada. Todas las bodegas contaron con espacios dedicados a la cultura, con música, exposiciones y actos en los que el vino estuvo presente de forma inherente, como no podía ser de otra manera.

Esta VII edición comenzó con el taponazo inaugural en la plaza de España en la que los bodegueros palmerinos, la corporación municipal y la reina de la Fiesta de la Vendimia de este año, Miriam Ortiz, y sus damas brindaron con el oro líquido de esta tierra. García se refirió a ellas para resaltar que "representan la juventud y la continuidad de la fiesta" ligada a la tradición vinícola de La Palma.

La Noche Blanca de la Cultura y el Vino se ha convertido en una cita obligada para amantes del vino y la cultura, a través de un intenso recorrido por enclaves y actividades que suponen un continuo disfrute para los sentidos, a través de la degustación enológica y gastronómica, y de la escucha y las observaciones de un amplio abanico de actividades culturales.

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