Nos presenta una colección destinada a realzar su carácter artesanal, a través de la utilización de complementos de croché como peinetas y pendientes.

Inspirada en los jardines de Normandía y el barroco francés, presenta una colección de vestidos con forma de sirena, mangas con volantes vaporosos y volantes de capa y canasteros.

La colección que presenta apuesta por el romanticismo de la elegancia y sensualidad con aires retros y naif.

Con gesto torero la diseñadora dedicó al modisto italiano el gran éxito que acababa de cosechar su tercera colección de trajes de flamenca en una repleta Pasarela SIMOF.

Texturas como las gasas, los crêpes de satén, encajes y popelín, se combinan sobre la pasarela con una amplia gama de colores.

Como su propio nombre indica dedica su colección a la copla, como ya hiciera el año pasado rindiendo homenaje a Rocío Jurado. Los diseños que presenta este año evocan el espíritu artístico de una gran coplera, Lola Flores, nos trajes que respetan la tradición de las líneas flamencas.

La diseñadora busca en la Sevilla más antigua la armonía entre lo religioso y lo profano, el sentir cofrade y sevillano impregnado de los destellos de las antiguas civilizaciones. Recupera las mantillas, los encajes antiguos, brocados con estampaciones dorados, terciopelos y richeliers con destellos dorados.

En los diseños de Loli Vera prevalecen los volantes voluminosos, los escotes pronunciados, las mangas largas y los trajes con flecos por todo el cuerpo que combinan cortes y colores. Como en anteriores colecciones, la sevillana vuelve a la elegancia de los cuellos alzados, las camisas de organza con chaquetillas y las faldas al talle.

La nueva propuesta de Ángeles Espinar vuelve a sorprender por la maestría de sus creaciones. En esta ocasión, la sevillana apuesta por una colección popular costumbrista.

La diseñadora mantiene el tradicional traje de flamenca sin dejar de innovar en las creaciones.