A menos de un mes de la vuelta al cole, centros del primer ciclo de Educación Infantil (0 a 3 años) reclaman a la Junta de Andalucía cobros pendientes del curso anterior. Entre ellos, plantean que algunas de las escuelas de Huelva no han recibido el dinero para cubrir los cierres por covid, algunas otras no cuentan aún con el abono correspondiente a las plazas de niños en riesgo de exclusión y que, en otros casos, la liquidación correspondiente al mes de junio tampoco llega.

Son conceptos cuya cuantía no especifica Escuelas Infantiles Unidas, una de las asociaciones que representa a los centros adheridos al Programa de Ayuda a las Familias de la Administración andaluza, debido a que, explican, no afectan a todos los centros de manera generalizada, pero que supone un notable perjuicio al que lo padece, como explica la secretaria en Huelva, Gema Alarcón.

A través de un comunicado, el colectivo reivindica “el esfuerzo enorme que han realizado los centros por aplicar los protocolos covid”, manifiesta la presidenta del colectivo en Huelva, Maribel Uncala. Sin embargo, “el sector no entiende”, prosigue, que a pesar de ello “haya tenido tan poca respuesta equivalente, ni implicación por parte de la Administración”.

“La incidencia del covid en las escuelas infantiles ha sido mínima, pero alguna ha habido”, explica Alarcón. Como los alumnos son menores de seis años no llevan mascarilla y al presentarse un caso positivo se cerraba el aula. Tras la medida, “se retira el dinero de ese mes, luego hay que pedir una subvención y la tramitación puede tardar dos o tres meses; la resolución puede salir favorable o no, con el hándicap añadido de que en caso positivo, bonifican un porcentaje del precio de la plaza [320 euros]”. En relación con esto, Escuelas Infantiles Unidas mantiene que “es incomprensible que los cierres covid estén sin cobrar y a los centros les hayan descontado los importes”.

El Programa de Ayuda a las Familias cubre también plazas de niños en situación de riesgo de exclusión social. Son plazas que bonifica la Junta al cien por cien que, según la asociación, “no se sabe por qué, la Agencia Pública de Educación (APAE) lleva sin pagar desde enero”, explica Alarcón. Aunque tampoco en este caso todas las escuelas sufren esta circunstancia, la secretaria explica que una en concreto “cuenta con siete niños” en esa situación.

Otro de los frentes que reclama la organización es el referido a las bonificaciones pendientes a las familias que recurrieron la denegación de las ayudas. En algunos de los casos, la Administración les ha dado la razón pero son las escuelas infantiles las que reciben el pago delegado, no las familias directamente, sin embargo a algunos centros –“pocos”, especifica Alarcón– tampoco les ha llegado esta partida. Otras escuelas, por último, seguían teniendo pendiente a día de ayer “la liquidación correspondiente al mes de junio”, asegura la secretaria.

“El retraso en algunas partidas es enorme”, critica la presidenta de Escuelas Infantiles Unidas, que añade que “las explicaciones dejan de ser suficientes”. Uncala añade que la consecuencia de los retrasos es “agravar la situación económica de los centros, arrastrando la supervivencia desde marzo de 2020”.

De cara al futuro, la asociación hace referencia a que “se sigue insistiendo desde el Ministerio de Educación en que los fondos europeos destinados a Educación Infantil serán para generar nuevas plazas”, pero Gema Alarcón advierte que “en Andalucía no faltan, cada año quedan más vacantes”.

Por ello, defiende que lo adecuado es “ayudar a las familias y avanzar en la gratuidad, muchas familias vienen a las escuelas a preguntar y se van porque no pueden pagar, no puede haber niños sin escolarizar”. En este sentido, la presidenta incide en la defensa de extender las plazas bonificadas “y así lo ha suscrito el Parlamento de Andalucía, pero manteniendo la actual red de centros de educación infantil, que es más que suficiente”.