Este verano se antoja complicado, especialmente en Andalucía, puesto que a los elevados precios de luz y gas se sumarán temperaturas extremadamente altas que nos obligarán a recurrir a ciertos electrodomésticos para ayudarnos a luchar contra el calor.

Por ello, además de preocuparnos por la factura al final de cada mes, es importante que nos centremos en poner a punto aquellos electrodomésticos que serán nuestros mejores aliados veraniegos para poder climatizar nuestro hogar a nuestro gusto sin preocuparnos por el calor del exterior.

Uno de los electrodomésticos más costosos pero eficientes contra temperaturas extremas es el aire acondicionado. Aunque existan aparatos alternativos de lo más diversos, sigue siendo la opción elegida por hogares de todo el mundo para mantenerse frescos cuando llega el verano.

Ahora bien, hay pocos disgustos más grandes en temporada veraniega que cerrar tus ventanas, sentarte en tu sofá y disponerte a encender el aire acondicionado para una buena siesta o simplemente relajarte o incluso teletrabajar, que cada vez es más común en el mercado laboral en general, solo para darte cuenta de que este se encuentra averiado y tendrás que aguantar el calor hasta poder repararlo.

Una de las comprobaciones que pueden ahorrarte este disgusto es revisar el gas de tu aire acondicionado:

¿Cuál es la función del gas en tu aire acondicionado?

Este gas sirve como refrigerante, de manera que enfría el aire que recibe del ambiente o lo calienta, según el uso que se le quiera dar a este electrodoméstico. En aires acondicionados modernos que disponen de bomba de calor este gas refrigerante hace un recorrido por un circuito que absorbe el calor del exterior y lo evacúa por otro. Dicho circuito está completamente sellado y hermético, o sea que en condiciones normales de uso el gas no saldrá del mismo.

Lo componen diversas piezas:

• El compresor, que hace las veces de una especie de motor y es la pieza que consume energía.
• El evaporador absorbe el aire caliente del ambiente y lo enfría.
• El condensador libera el aire caliente que ya se ha transformado en frío.
• Entre las dos piezas anteriores, se encuentran un regulador y diversos ventiladores que ayudan a la circulación del aire en el aparato.

Este gas debe recargarse o revisarse en ciertos supuestos de avería

• Cuando el aparato de aire acondicionado no emite aire frío ni caliente, lo cual se suele deber a falta de gas refrigerante de manera que no funciona la bomba de calor. Otras posibles causas son averías en el compresor o en el ventilador de la unidad exterior.
• Cuando se congela la unidad exterior del aire acondicionado, lo cual suele deberse a un descenso de presión a causa de falta de gas, y esto provoca que se produzca la evaporación antes de llegar a la unidad interior del aparato. También puede suceder si los filtros del aparato están sucios.
• También puede congelarse o escarcharse la unidad interior (también conocida como split).
• Si el aparato interior del aire acondicionado gotea puede estar relacionado con la congelación interior, ya que cuando este hielo se descongela aparecerá agua en lugares del aparato en los que no suele aparecer.
• El equipo de aire acondicionado puede sobrecalentarse y descomponer el gas refrigerante necesario para su funcionamiento propio.