Causa criminal

Agresiones con ácido a mujeres: así fue el brutal ataque de 'El Melillero' a su expareja y otros casos

'El Melillero', autor del delito contra su expareja y una amiga

'El Melillero', autor del delito contra su expareja y una amiga / Jorge Zapata (EFE)

El 12 de enero de 2021 Sandra y Cristina fueron atacadas por un hombre que vertió ácido sulfúrico sobre ellas a través de la ventana semiabierta del coche que conducían en la localidad malagueña de Cártama. Ambas tuvieron que salir del vehículo para evitar asfixiarse en su interior y fueron rápidamente trasladadas a las unidades de quemados de los hospitales Virgen del Rocío de Sevilla y Regional de Málaga. En el caso de Sandra las lesiones que presentaba eran de extrema gravedad

Quien ideó el crimen fue su expareja, José Arcadio D., al que se le conoce como El Melillero, y en él participaron hasta cinco personas más.

Sandra tenía 26 años cuando ocurrieron los hechos y era maestra de Educación Infantil.  Había conocido a José Arcadio, también de 26 años, unos meses antes en Marbella, en torno a mayo de 2020. Él, por aquel entonces, ya pertenecía a una organización criminal de tráfico de drogas y tenía sobre él 10 sentencias por diversos delitos.

La relación entre ambos, que apenas duró siete meses, había pasado por muchos momentos difíciles. Vivieron juntos en dos viviendas en Málaga pero las vejaciones, los insultos e incluso las agresiones físicas a Sandra eran frecuentes. Por eso en diciembre de ese mismo año ella decidió acabar con la relación. Esto no le sentó bien a El Melillero, quien se obsesionó con ella.

La llamó incesantemente por teléfono durante un mes, instaló un geolocalizador en su coche para saber dónde estaba en cada momento e ideó un plan para arruinarle su vida. Antes del 12 de enero, la persiguió hasta una gasolinera en Torremolinos para decirle que iba a matarla, que le iba a destrozar la cara que tenía. En ese momento su mejor amiga, Cristina, estaba con Sandra y ella también recibió amenazas de este individuo.

El 9 de enero, El Melillero se reunió con cuatro personas con las que ideó cómo atacar a Sandra y cómo organizar la huida, posteriormente. Dos días después, la noche del 11 de enero, José Arcadio y otro de sus compañeros, conocido como Poti, siguieron a las dos amigas hasta donde se encontraban y le hicieron el gesto de rajarles el cuello, según relató el fiscal.

Al día siguiente, mientras ambas estaban en el interior del coche Mini blanco de Sandra con las ventanillas algo abiertas, Poti las interceptó y arrojó con fuerza una botella de ácido sulfúrico al 98% de pureza sobre las chicas, que ante el ataque tuvieron un accidente contra una columna. Unas concejalas que se encontraban cerca pudieron auxiliarlas y llamar a emergencias al escuchar los gritos de las chicas. Sandra fue trasladada en helicóptero a la unidad de quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla en extrema gravedad. La tuvieron que entubar e inducirle el coma. Cristina también fue trasladada, menos grave, al hospital Regional de Málaga.

A Sandra la tuvieron que someter a 12 intervenciones quirúrgicas entre enero y abril de 2021 y las secuelas que presenta la incapacitan para volver a ejercer como maestra o para estar en cualquier puesto de trabajo de cara al público. Tiene problemas para tragar, no puede cerrar un párpado y no puede mover varias partes de su cuerpo. Cristina también tiene secuelas de por vida, tanto físicas como psicológicas.

José Arcadió, quien planeó como huir para escapar de la Policía, fue finalmente capturado tres días más tarde en Málaga. Junto a él también fueron detenidas las cinco personas que participaron, en mayor o menor grado, en los hechos.

Ahora la Fiscalía solicita 51 años y seis meses de cárcel para José Arcadio D. por un delito de asesinato en grado de tentativa, por dos delitos de amenazas graves, dos más de acoso, uno de maltrato habitual y otro de pertenencia a una organización criminal. Además tiene una orden de alejamiento de un kilómetro a sus víctimas, la prohibición de comunicarse con ellas durante 50 años y la imposibilidad de vivir en Cártama durante 30 años.

Por su parte, quien arrojó el ácido, Poti, se enfrenta a 38 años y cuatro meses de cárcel por un delito de asesinato en grado de tentativa, otros dos de amenazas y otro de pertenencia a organización criminal. Para el resto de implicados la Fiscalía ha solicitado 35 años de cárcel por las mismas causas. Además, entre todos tendrán que indemnizar a Sandra con 1,1 millones de euros y a Cristina con 312.522 euros.

Agresiones con ácido a mujeres

Esta no es la primera vez que una mujer es agredida como consecuencia de la violencia machista con ácido sulfúrico.

En el año 2017 la modelo italiana Gessica Notaro fue rociada con ácido cuando tenía 28 años. La joven estaba entrando en su casa cuando su expareja se avalanzó sobre ella y le vertió el líquido sobre el rostro. Entre las consecuencias que sufrió estuvo la pérdida de un ojo y la desfiguración de su rostro. El agresor fue condenado a 10 años de prisión y a abandonar el país cuando los cumpliera. También en Madrid en el año 2007 otra mujer fue agredida con ácido clorhídrico por su ex marido.

En el año 2019, Elena Ríos, una mujer mexicana de 29 años fue atacada con ácido sulfúrico por su ex marido, un diputado mexicano. Se tuvo que someter a 13 intervenciones y presenta secuelas con las que tendrá que convivir el resto de su vida. 

En países como Afganistán, Pakistán, India, Camboya o Bangladesh son habituales este tipo de agresiones a mujeres. Según destaca ONU Mujeres, los ataques con ácido no pretenden acabar con la vida de las víctimas, sino con su belleza. Quieren avergonzarlas y humillarlas y algunos de los móviles son los celos o el deshonor.

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