Las ruedas de prensa que lleven a cabo hoy tanto Míchel como Javier Clemente, entrenadores de Sevilla y Sporting, respectivamente, prometen estar marcadas por la polémica que ambos protagonizan desde hace años, cuando coincidieron en la selección española. Sólo una vez se han visto las caras en un partido desde que el madrileño inició su carrera en los banquillos y fue en 2010, cuando el ahora sevillista dirigía al Getafe y el de Baracaldo fue reclamado por el Valladolid para intentar salvarlo del descenso, cosa que no consiguió.

El choque, disputado en el mes de abril en Pucela, acabó con empate a cero goles, estando marcada la víspera por los fuertes ataques que el ex seleccionador dedicó a Míchel, al que acusó de insultarlo en un artículo de prensa y anunciando que no lo saludaría. De hecho, no lo hizo.

Míchel, en cambio, en aquella comparecencia previa al choque evitó dar pie al morbo e incluso dijo que era un "buen entrenador". Hace unas semanas, cuando Clemente se hizo cargo del Sporting, volvió a repetir sus palabras. Hoy, otro capítulo.