Enfado monumental el que mostraban los futbolistas del Sevilla a la conclusión de un partido en el que se quejaron del comportamiento de los jugadores del Sporting, cuya dureza rozó la violencia en algunas fases del partido debido a la permisividad con la que Estrada Fernández llevó el encuentro.

Muy serio se mostró Fernando Navarro en la zona mixta de El Molinón a la hora de analizar el desarrollo del partido: "Ha sido un encuentro muy violento por su parte y paradójicamente nos hemos llevado nosotros las tarjetas porque el árbitro ha sido muy permisivo con su juego, pero no es excusa. Hemos hecho méritos suficientes para ganar el partido pero esto sigue, quedan 12 partidos y hay que seguir".

En cuanto al juego mostrado en cada parte del partido, el lateral catalán reconoció que en la primera mitad no estuvieron acertados, aunque eso cambió en la segunda: "Nos hemos confundido al querer jugar por dentro en la primera mitad y ellos han llegado por fallos nuestros. En la segunda hemos estado mejor, con mayor posesión en su campo y creo que no hemos merecido la derrota porque hemos tenido cinco ocasiones de gol claro".

En lo referente a los golpes con los que algunos sevillistas acabaron el partido, Fernando Navarro lanzó un reto: "Jesús y Manu han llegado con golpes muy fuertes, pero esto es muy largo y el año que viene jugaremos otra vez contra ellos y, bueno, ya nos conocemos. Hay que felicitarlos y esperemos que los dos consigamos nuestros objetivos", finalizó.

El otro jugador en atender a los medios fue Coke, que antes de valorar el partido explicó lo sucedido en el túnel de vestuarios: "No ha pasado a mayores, ha habido un momento de tensión pero nos hemos metido cada uno en nuestro vestuario y ya está. No hemos sido muy superiores, hemos estado mejor pero ellos han ganado con poco. La segunda mitad ha sido nuestra y no hemos dado con el gol, pero teníamos que haber hecho las cosas mejor antes".

En cuanto al ambiente hostil afirmó que estaban preparados: "Sabíamos que ellos trataban este partido como una final, pero veníamos a por los tres puntos y en la primera mitad no hemos estado todo lo bien que deberíamos, pero la temporada cada vez que nos puede dar un revés nos lo da".

Para finalizar Coke se refirió tanto a la labor arbitral como al partido del próximo sábado ante el Barcelona: "No nos vamos a quejar por que nos peguen patadas, pero el árbitro se ha equivocado en el reparto de las tarjetas. Ante el Barcelona hay que salir a morder y tomar ejemplo de lo que ha hecho el Sporting".