Sampaoli avisa de que el partido ante el Valencia del sábado en el Sánchez Pizjuán será complicado porque llega un adversario que "tiene menos puntos de los que merece". El técnico afirma que "el nuevo sistema del Valencia", implantado por el italiano Cesare Prandelli, "igual provoca cambios" en su dibujo.

Sampaoli precisó que "habrá rotaciones en los próximos quince días", hasta que el Sevilla se juegue en Lyon el pase a los octavos de final de la Liga de Campeones. Anunció que Mariano y Carriço "no van a llegar" para el sábado, mientras que el lateral zurdo Sergio Escudero "tiene molestias", en sendos casos derivadas del partido del martes frente al Juventus. Sampaoli, así, podrá dar entrada a futbolistas que no vienen jugando porque "el alto rendimiento de unos dificulta la entrada de otros", pero ahora necesita que "participen todos" para un "partido difícil", insistió.

Sampaoli afirmó que "el resto" de sus hombres "está en condiciones" a excepción del mediapunta francés Samir Nasri, a quien el cuerpo técnico está "cuidando para que llegue bien a Lyon", y el centrocampista danés Michael Krohn-Dehli, lesionado desde la pasada primavera. "Hoy se ha entrenado con el grupo y esperamos que vuelva pronto", comentó el entrenador sevillista con respecto al jugador nórdico, quien sufrió una grave lesión de rodilla.

El preparador argentino admitió que le ha "trastocado la situación en Champions", ya que "pensaba estar clasificado con diez puntos" pero se mostró tranquilo porque en esta etapa busca "más una identidad que títulos" y por ello está satisfecho porque tiene "la sensación de que el equipo disfruta".

Entre las claves para conseguir la victoria ante el Valencia, Sampaoli afina eb paliar la falta de gol. "La no concreción de las situaciones que se generan hace que el equipo termine haciendo un esfuerzo enorme. Es la deuda que actualmente tiene el equipo. Cuando nos quedamos con diez ante la Juve, tuvimos ocasiones claras para poder hacer daño y marcar antes que ellos, pero no consolidamos esas chances. Ojalá que este tiempo que resta antes de Navidad nos permita encontrar los goles porque si no, cada partido será un estrés total", afirma el técnico.