Semana Santa

De cara al centenario fundacional

  • La hermandad está inmersa en celebraciones como los 75 años de la Virgen y los 100 que se conmemorarán en 2016

BUENA Muerte contribuye de manera destacada en esa exhibición de arte cofrade que supone el Jueves Santo de la ciudad. Posee dos bellos pasos llenos de personalidad que salieron a la calle pasadas las 19:00 con una Plaza de las Monjas expectante.

La céntrica hermandad vivió hace cerca de un mes, una celebración histórica como fue el 75º aniversario de la bendición de Nuestra Madre de Consolación. Para ello se organizó un Rosario de la Aurora que llevó a la imagen a La Concepción, recordando que este templo fue antaño la sede canónica tal y como recordó su hermano mayor Juan Antonio Prieto.

Antes de la salida de los pasos, el templo de las Agustinas vivió los siempre emotivos momentos de las primeras levantás que corrieron a cargo de la empresa Onubense de Baterías en el caso del misterio y del delegado diocesano de Hermandades, Emilio Rodríguez en el de la Virgen de Consolación. Cabe además la circunstancia de que Rodríguez es su director espiritual. Ya por la mañana de este Jueves, el templo de las Agustinas recibió un constante flujo de visitantes: hermanos y cofrades de otras hermandades para desear a los de la Buena Muerte, una grata estación de penitencia.

La angostura de la calle Tres de Agosto incrementa la espectacularidad de la salida. El Señor de la Buena Muerte salió sobre las rodilla de sus costaleros. Una vez sobre la rampa, se procedió al alzado del Cristo hasta destacar ampliamente y ofrecer un bello paso para el deleite estético.

El paso de la Virgen lució por su parte, los estrenos de este año: el calado del canasto, los querubines en los laterales del mismo y cuatro fanales.

A la cofradía le pilló de noche su paso por la Carrera Oficial. Sus singulares pasos marcaron su impronta transmitiendo serenidad y la propia alma de esta cofradía.

Juan Antonio Prieto incidió en lo vivido el pasado 9 de marzo que "rescató los rosarios de la Aurora que la hermandad realizaba aunque en aquel entonces eran en sentido inverso: desde La Concepción hacia el Convento de las Agustinas" y todo ello teniendo muy cerca el centenario de la fundación de la propia hermandad que se celebrará el próximo año.

El hermano mayor se congratuló también de que este año se pudieran arreglar los problemas que se habían tenido con el sistema que permite el alzado del Cristo de la Buena Muerte una vez que la imagen ha salido del templo. Tras las reparaciones realizadas ayer pudo comprobarse que dicha operación se llevó a cabo con normalidad no exenta de cierta solemnidad ya que el Cristo, que sale 'enterrado' en su monte a la altura de la cintura, se va alzando lentamente y de manera casi imperceptible hasta llegar a la elevación deseada.

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