Recreativo

Un cerebro para la medular del Recreativo

  • El Decano hace oficial el fichaje del centrocampista Quique Rivero, que acaba de ascender con el Racing a Segunda A

  • El santanderino coincidió con Alberto Monteagudo y Sergio Jiménez en Cartagena

Quique Rivero controla el balón durante un entrenamiento con el Racing de Santander.

Quique Rivero controla el balón durante un entrenamiento con el Racing de Santander. / Daniel Pedriza / Diario Montañés

Un cerebro para la medular. El Recreativo de Huelva anunció ayer el fichaje del centrocampista Quique Rivero para la próxima temporada.

Enrique Rivero Pérez es un centrocampista de 27 años de edad que goza de la confianza del nuevo entrenador recreativista, Alberto Monteagudo, que ya lo tuvo a sus órdenes en el Cartagena. Nacido en la localidad cántabra de Cabezón de la Sal el 16 de abril de 1992, este futbolista llega al Decano procedente del Racing de Santander, equipo con el que consiguió el ascenso a Segunda División.

El interés del Recre por este futbolista fue adelantado por Huelva Información el pasado 1 de julio. Con su incorporación la plantilla albiazul da un nuevo salto de calidad. Es un jugador creativo, llamado a marcar diferencias. Posee mucha calidad, un buen golpeo de balón y visión de juego. Se formó en las categorías inferiores del Racing, con el que debutó con 19 años con el primer equipo en Primera División en un encuentro oficial en la temporada 2011-12. Esa campaña jugó cuatro partidos (todos como titular), permaneciendo dos años más en el club cántabro.

En el curso 2013-14 se marchó a Tenerife, donde compitió dos temporadas en Segunda A. Más tarde se comprometió con el Cartagena, conjunto en el que estuvo otros dos años en Segunda B en la 2015-16 y 2016-17 disputando 29 y 36 partidos de liga respectivamente, con 1.982 y 2.861 minutos cada temporada, en las que anotó 2 y 4 goles.

Curiosamente en el club departamental coincidió no sólo con Monteagudo, sino también con el centrocampista Sergio Jiménez, otro de los refuerzos del Decano. Ambos eran los futbolistas titulares en el doble pivote de la medular que permitió al Cartagena proclamarse campeón del grupo IV, aunque luego el ascenso se le escapó de las manos. Con ellos el centro del campo del Recreativo aumenta su potencial y tanto Jiménez como Rivero ya conocen los sistemas y el modo de entender el fútbol de Monteagudo, por lo que su adaptación debe ser sencilla.

Tras su etapa en el Cartagena Quique Rivero regresó a su tierra, al Racing de Santander, donde ha estado las dos últimas campañas, también en Segunda B, pero en la última perdió protagonismo en el equipo ya que el técnico Iván Ania apostó más por alinear en el centro del campo a otros futbolistas como pueden ser Sergio Ruiz o Mario Ortiz. En total jugó 27 partidos (17 de ellos como titular), con 1585 minutos de juego, aunque curiosamente ha sido la temporada en la que ha logrado más goles, 7.

Con su llegada el Recreativo sigue completando su plantel. El club, hasta ahora, ha anunciado nueve fichajes: el portero canario Nauzet Pérez (procede de la UD Las Palmas), el mediocentro Sergio Jiménez (llegado del CD El Ejido), el extremo granadino Alfonso Fernández (CD El Ejido), el centrocampista onubense Miguel Cera (categorías inferiores del Sevilla), el medio ecuatoriano Gustavo Quezada (cedido por el Lugo), el lateral izquierdo Nano González (Almería), el central Jorge Morcillo (Hapoel Irioni Kiryat Shmona de Israel), el extremo José Manuel Irizo (cedido por el Betis) y Quique Rivero (Racing). A ellos hay que sumar los cuatro jugadores que tenían contrato en vigor de la pasada campaña: el meta Álex Lázaro, el central Iván González (quien se recupera de una intervención de una lesión en el talón de Aquiles) y los centrocampistas Víctor Barroso y Carlos Martínez. También hay que añadir las renovaciones del capitán, Diego Jiménez, y los delanteros Carlos Fernández y Alberto Quiles. Además han subido dos jugadores sub 23 desde el filial Nené y Ponce.

El club onubense también tiene a prueba al central Jesús López, que ha terminado su contrato con La Pobla de Mafumet, filial del Nàstic de Tarragona.

Aún quedan por llegar varios refuerzos y el Decano espera encontrar algún chollo en el mercado. La intención de los responsables albiazules es doblar todas las posiciones y contratar a futbolistas que puedan marcar diferencias en la categoría. Para ello en algunas posiciones es muy probable que el Decano aguarde prácticamente hasta que esté a punto de cerrarse la ventana veraniega de fichajes para aumentar aún más la calidad de su plantilla. El objetivo es completar un equipo muy competitivo que mantenga viva la llama de la ilusión entre los aficionados recreativistas.

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