Con el fin de seguir promoviendo la conservación de la raza equina autóctona en peligro de extinción, y ante la imposibilidad de traer por segundo año consecutivo y a causa de la pandemia por Covid-19 el ganado equino marismeño a Almonte con la Saca de las Yeguas, miembros de la Asociación de Criadores de Ganado Marismeño han procedido a realizar en la marisma las faenas que tradicionalmente y desde hace más de cinco siglos tienen lugar en los corrales almonteños: identificación de los potros nacidos este año, marcaje de potrillos, tuza de yeguas, así como identificación mediante microchipado, según ha informado el Ayuntamiento de Almonte.

Otra importante tarea realizada es el control de la capacidad de carga de las fincas donde se crían asilvestradas las yeguas, para lo cual se recuentan pérdidas de ejemplares, por muerte natural, y se retira el excedente de ganado.

Yeguas marismeñas en ocho fincas de Doñana

Con este motivo, y desde mediados del pasado mes de agosto, los ganaderos almonteños han procedido al encierro del ganado en corrales y toriles en las ocho fincas marismeñas del Parque Nacional de Doñana donde se cría asilvestrado el ganado de los ganaderos de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Marismeño de Almonte, en: Matochal, Las Nuevas, Marismillas, El Rincón del Pescador, Marisma Gallega, Rocina Sur, las Playas del Rocío y La Vera.

Las faenas marismeñas alternativas a la Saca de las Yeguas han concluido este fin de semana, con las actividades llevadas a cabo en las dos fincas más cercanas a la aldea de El Rocío: La Vera y Las Playas.

El primer teniente alcalde, José Miguel Espina bejarano, junto con la concejala de Ganadería, Macarena Robles, y la concejala de Cultura, Rocío Pérez, visitaron el pasado sábado las instalaciones de estas dos últimas fincas, donde fueron informados por el presidente de la asociación, Juan Adolfo Arangüete, y otros miembros de la junta de gobierno, sobre las tareas y faenas llevadas a cabo a lo largo de casi un mes.