La campaña de recogida de la fresa continúa con retraso. A la reposición de plantas por los problemas que dieron algunas de ellas, se han sumado las bajas temperaturas registradas en las últimas semanas en la provincia, lo que ha provocado una merma en la producción en relación a otras temporadas.

Los productores esperan que la situación comience a normalizarse a partir de primeros del próximo mes, de manera que para el 14 de febrero, San Valentín (Día de los Enamorados), cuando las empresas aprovechan para lanzar su campaña de promoción con nuevos envases, la producción alcance volúmenes muy superiores a los actuales para cubrir la demanda del mercado nacional e internacional.

Los freseros tienen además la vista puesta en Berlín, donde se celebra del 6 al 8 de febrero Fruit Logística, la mayor feria internacional de frutas y hortalizas, en la que se sector cierra buena parte de los acuerdos comerciales anuales.

Además a partir del 1 de febrero comenzarán a llegar las primeras trabajadoras con contrato en origen procedente de Marruecos.

En lo que va de mes, la fresa ha tenido poca presencia en los mercados internacionales, si bien poco a poco está registrando un impulso. Y es que, aunque las temperaturas medias han bajado, sí que ha habido un mayor nivel de radiación y un menor nivel de humedad, que han permitido un mayor número de frutos.

Los precios han sido elevado y se han mantenido debido a la escasez de fruta por una producción reducida

En las primeras semanas de este mes, los precios percibidos por el agricultor se han mantenido, e incluso han registrado algún incremento, respecto al mismo periodo de 2018, según el observatorio de precios de la Junta de Andalucía. Ello a pesar de una mayor disponibilidad de fruta, ya que la demanda del mercado internacional es alta. Algunos agricultores se quejan del precio que reciben en comparación al que el consumidor paga.

La comercialización de fresa arrancó en la segunda quincena de diciembre, a pesar de las lluvias otoñales y de la necesidad de replante en la variedad Fortuna, la mayoritaria en Andalucía. El retraso de la campaña, en aproximadamente tres semanas, se ha reflejado desde entonces en la merma de los volúmenes comercializados, muy inferiores si se comparan con los de las mismas semanas del año anterior.

Con el comienzo del nuevo año los volúmenes comercializados en la primera semana continuaron en la misma tónica, al estimarse que se había comercializado alrededor de un 59% menos que en la primera semana de 2018.

Como contrapartida, estos menores volúmenes de fresa estuvieron acompañados de unos niveles de precios superiores a los obtenidos en el mismo periodo de la campaña anterior, con un incremento de entre un 45% y un 57%.

Fortuna y rociera son las variedades de fresa más frecuentemente implantadas en esta campaña, como ya sucedió en la anterior. Fortuna representa la apuesta por la precocidad y rociera por la calidad organoléptica, sin olvidar también la precocidad.

Frambuesa

Por su parte, el volumen comercializado de frambuesa en la primera semana de enero se ha incrementado del orden de un 25%, respecto a la anterior, mientras que la bajada del precio percibido por el agricultor es solo del 3% respecto a la semana anterior. En la semana segunda de 2019 el precio medio de la frambuesa es de 7,14 euros el kilo, muy similar al precio alcanzado en la misma semana del año pasado.

Durante el periodo navideño se ha percibido una drástica reducción de la cantidad de frambuesa comercializada en comparación con las pasadas navidades. A pesar de ello, los precios no se han visto compensados en proporción, si bien el percibido por el agricultor ha sido algo superior.