Provincia

El Pleno aprueba hacer auditorías de las cuentas de los últimos 28 años

  • Los acuerdos prevén dos períodos y dos vías. A iniciativa de IU se revisará de 1999 a 2007 y a propuesta del alcalde los 20 años anteriores. Se acudirá a la Comisión de Cuentas o a una empresa

El Ayuntamiento de Bollullos par del Condado se puede ganar la entrada en el Guiness de los récords, como apostilló ayer el concejal del PP, Francisco Martín, si llega a llevarse a cabo el acuerdo plenario de ayer. Los tres grupos con representación municipal acordaron por unanimidad un lote de auditorias. Por una parte, y a propuesta de IU, se acordó realizar una auditoría externa de las cuentas municipales de 1999 a 2007, aunque también se aprobó solicitar esa misma auditoría a la Comisión de Cuentas de Andalucía, bajo la premisa de que si es este organismo quien realiza el trabajo "gratis", eso que se ahorra el Ayuntamiento. Por otra parte, y a propuesta del alcalde, el socialista Carlos Sánchez, se aprobó lo mismo pero de los veinte años anteriores, es decir, de 1979 a 1999.

Si los acuerdos plenarios fueron singulares no lo fue menos la sesión. Los portavoces políticos coincidieron en no tener ánimo de favorecer la crispación y en anteponer la 'bondad' de los gobiernos democráticos (de los últimos 28 años) porque "todos hemos podido meter la pata pero, estoy convencido de que nadie ha metido la mano", argumentó el portavoz de IU, Francisco José Díaz, convencimiento que posteriormente apostillaron los demás portavoces políticos.

Díaz justificó sus propuestas diciendo que, en primer lugar, se trata de un compromiso electoral y por que su intención no era otra que "conocer la situación económica del Ayuntamiento". Claro que, en la segunda parte de su intervención, dio a conocer su firme propósito de gobernar Bollullos "de manera inmediata y para ello necesitamos conocer las cuentas".

Momento que aprovechó el concejal popular para aseverar que su grupo municipal apoyaría sin parpadeos una moción de censura de IU para apartar a Carlos Sánchez de la Alcaldía. Pero la situación está tan enrevesada en la Corporación municipal que, por otra parte, el alcalde socialista aseguró que ante la evidente falta de entendimiento con la coalición de izquierdas, está tratando de abrir una línea de diálogo con el PP para garantizarse un gobierno estable para lo que queda de mandato, es decir para los próximos tres años y medio largos, "para no tener que traer y llevar sin llegar a acuerdos", concretó.

El alcalde llegó al Pleno con dos ases en la manga. Por una parte, presentó una iniciativa por la vía de urgencia para celebrar un segundo Pleno extraordinario con un orden del día idéntico al anterior pero sobre distintos años. La propuesta del alcalde era realizar una auditoria sobre las cuentas municipales de los primeros veinte años de la democracia, desde 1979 a 1999, período en el que gobernó IU. La segunda sorpresa la dio a conocer a lo largo de su intervención y con ella intentó, en vano, que IU retirara su propuesta. Consistía en una carta de la Cámara de Cuentas de Andalucía con fecha del 28 de noviembre en la que comunica al Ayuntamiento que revisará las cuentas de los años 2002 a 2004 al no haber rendido las cuentas de dichos ejercicios, precisamente es el período durante el que el portavoz de IU fue concejal de Hacienda.

Carlos Sánchez empezó ayer su discurso político diciendo que iba a hablar en "plata" y por ello dijo que si la oposición quería claridad había que buscarla en toda la etapa democrática del Ayuntamiento de Bollullos. Sin embargo, intentó convencer a los grupos de la oposición de que las auditorías se quedaran aparcadas porque "muy pronto voy a presentar la liquidación de 2006, que ya está hecha y se conocerán las cuentas". Además insistió en que "yo sé lo que van a decir las auditorias de 1999 a 2007, sin necesidad de gastar dinero". En base a la liquidación cerrada de 2006 avanzó que la deuda, sólo, a los proveedores locales es similar a lo que costaran las auditorías desde 1979 a 2007, cerca de 1,7 millones de euros.

El alcalde acabó con una propuesta, que cayó en saco roto, de olvidarse de las auditorías y se comprometió a informar a los grupos de la oposición del trabajo de la Cámara de Cuentas.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios