La diosa Fortuna ha sido este año mucho más benévola que en anteriores ediciones con la comarca de la Costa occidental de Huelva, donde al margen de El Gordo, que ha repartido la friolera de 240 millones de euros en Punta Umbría, el Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad ha dejado un reguero de quintos premios en distintos puntos del territorio.

El primero de ellos fue muy tempranero. Y es que apenas habían transcurrido unos minutos del inicio del sorteo, concretamente a las 9:18, los dos primeros niños de la residencia de San Ildefonso en subir al escenario del Teatro Real de Madrid cantaron el primero de los números premiados de la mañana. Fue el 89.986, agraciado con uno de los ocho quintos premios del sorteo, dotado con 60.000 euros a la serie.

Escasos instantes después la alegría se desbordaba en las dos administraciones de Loterías de la comarca que lo habían vendido: una en el núcleo cartayero de Nuevo Portil y otra en la ciudad fronteriza de Ayamonte. En ambos casos se trata de dos décimos expedidos por máquina, que han dejado un total de 12.000 euros.

Según indicó a Huelva Información la lotera cartayera Antonia Barroso, conocida por todos como Toñi y que es propietaria de la administración ubicada en la urbanización Pinares del Portil de dicho núcleo costero, "estamos muy, muy contentos, porque es la primera vez que damos un premio de la Lotería de Navidad, aunque ya en 2016 repartimos suerte con un premio de la Bonoloto de más de dos millones de euros, y en 2017 con otro de La Primitiva de 138.000 euros".

Esta mañana "he saltado de alegría", prosiguió, porque dar un premio del Sorteo de Navidad es más especial que otros si cabe, y más este año que la gente lo está pasando muy mal. Y por eso también me alegro mucho por la persona agraciada".

A la derecha, Ana Coronel, dependienta del punto de venta de Ayamonte que ha vendido un quinto premio.

Sobre la identidad del premiado aseguró no saber nada porque "al haber sido vendido por máquina no tenemos el control, y porque al estar la administración en una zona de playa y de segundas residencias, puede haber sido cualquiera, de aquí o de fuera que lo haya comprado durante el verano o en cualquier día festivo, que es cuando más gente hay por aquí".   

Toñi Barroso, que regenta su negocio en Nuevo Portil desde el año 1992, se enteró de que había dado el premio "nada más abrir", y tras recibir una llamada del delegado de Loterías del Estado en Huelva. Pero "como el sorteo no había hecho más que empezar, ni me lo creía", concluyó al tiempo que se disponía a abrir una botella de champán para celebrarlo con su marido y junto a sus clientes.

De forma paralela, en la administración de Loterías y Apuestas del Estado ubicada en la calle Benavente de Ayamonte, que inició su actividad en el año 1989, se vivía prácticamente lo mismo que en la de Nuevo Portil, tras vender igualmente un décimo con el mismo número, que también fue dispensado por máquina.

Ana María Coronel, la dependienta del negocio que había vendido el número, tampoco se lo creía y relató a este rotativo sentirse "muy emocionada" por ser "el primer premio que damos de Loterías, ya que previamente hemos repartido suerte, pero de otros sorteos". 

El premio "ha sido muy tempranero y nos hemos enterado porque nos han llamado desde la Delegación de Huelva", pero sobre todo porque el agraciado "ha venido de inmediato a comunicárnoslo", manifestó.

Sobre la identidad de éste la única referencia que ha hecho Coronel es que se trata de una persona de la barriada, a la que le han tocado 6.000 euros y "a la que yo misma le vendí el décimo, ya que vino hace unos días y me pidió varios, con distintas terminaciones, con la suerte de que el acabado en 86 ha sido uno de los quintos premios".

Lo único que le había comentado el afortunado ganador es que "estaba muy contento por las fechas en que nos encontramos, en las que hay muchos gastos, y que por tanto esto le iba a venir muy bien".

A pesar de todo, concluyó la lotera ayamontina, "para mí lo más importante es el hecho de haber dado un premio, y más este año tan complicado y difícil que estamos atravesando con lo que tenemos encima por la pandemia".

Paco Padilla y su hijo Mario, muestran el número agraciado con el quinto premio que han expedido en su administración de La Antilla

Por otra parte el número 43.831, que ha resultado agraciado con el séptimo de los ocho quintos premios del Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad, fue cantado ya bien entrada la mañana, habiendo sido vendido en varios puntos de la provincia, concretamente en Huelva capital, Cortegana y la playa lepera de La Antilla. En total se habían expedido siete décimos, cinco de ellos en la capital provincial.

La administración que más ha repartido ha sido la que está ubicada en la prolongación de la avenida de Andalucía de Huelva, mientras que las administraciones Piscis de la avenida de Castilla en La Antilla y La Fortuna, en Cortegana, habían vendido uno cada una a través de terminal.

Como en los casos de los loteros de Cartaya y Ayamonte, el propietario de la administración antillera, Paco Padilla, señaló a este periódico visiblemente emocionado y arropado por su mujer y su hijo, que este no es el primer año que reparte un premio de la Lotería de Navidad, ya que en la pasada edición vendieron un cuarto premio, y porque en este mismo punto de venta, del que se hizo cargo en marzo de 2019 (aunque cuenta ya con dos décadas de historia) se han repartido un total de seis premios del Sorteo de Navidad en los últimos siete años.

Es por ello por lo que se mostró "muy feliz", al tiempo que admitió desconocer quien ha podido ser el agraciado con este premio, puesto que ha sido vendido en décimo digital y porque, según sus palabras, "por aquí pasa mucha gente y de muy diversos lugares, sobre todo de Sevilla y de Badajoz, y porque al haber dado tantos premios en los últimos años acuden clientes expresamente a comprar Lotería de Navidad tanto de Lepe como de otros municipios cercanos".

"Estamos muy contentos", añadió, "aunque nos hubiese gustado más haber dado El Gordo o un segundo a tercer premio, pero si seguimos así todo llegará", concluyó con optimismo, al tiempo que mostró su deseo de que "el o los agraciados sean de la zona".