Provincia

Estrangulan a una joven mujer almonteña en su propia casa

  • La Guardia Civil busca al marido de la víctima, que amenazó con matarla y suicidarse, como sospechoso del crimen · Juani Cáceres era madre de dos hijos de corta edad

Juana María Cáceres, una mujer de 36 años de edad y natural de Almonte, fue ayer tarde hallada sin vida en su casa de Rociana del Condado en la calle Hermanos Álvarez Quintero.

En primera instancia y según todos los indicios la Policía Judicial de la Guardia Civil baraja una hipótesis: que haya sido su propio marido, que responde a las iniciales de C.M.D, quien presuntamente acabara con su vida y la estrangulara.

Previamente al suceso las dos hijas del matrimonio, de 10 y 7 años de edad, fueron trasladadas por su propio padre a casa de una de sus primas, lo que parece dar idea de la premeditación del crimen.

La Policía Judicial llegaba sobre las 19.15 horas y ordenaban despejar a la multitud que se congregaba en los alrededores e imponía un cordón policial a lo largo de toda la calle. La forense llegaría algunos minutos más tarde. En los aledaños de la vivienda los ciudadanos se agolpaban con el desconcierto, indignación y repulsa por lo que consideraban ya que podría ser un "brutal asesinato".

No obstante, el que su familia resida en Almonte evitó que se vivieran episodios de máxima tensión o enfrentamientos familiares.

En un primer momento, hasta Rociana se desplazaron una dotación de doce agentes de la Benemérita que comenzaban a rastrear la zona en busca del que ya se considera el máximo sospechoso.

Algunos vecinos se sorprendían y aseguraban haberle visto dirigiéndose a pie al camino de Montealto, ya que el sospechoso no posee carnet de conducir.

Diversos amigos de la víctima han afirmado que hace meses la pareja, a instancias de ella, habían comenzado a cursar los trámites del divorcio, por lo que él había optado por irse a vivir a casa de los padres. Entre tanto la víctima había iniciado recientemente una relación de pareja, una situación que según comentan le hizo caer en una profunda depresión.

Sin embargo, estas mismas fuentes sostienen que jamás imaginaron que podía llegar a cometer tal atrocidad, más aun cuando afirma que no existían antecedentes de malos tratos ni denuncias al respecto.

Al cierre de esta edición las autoridades policiales no habían hallado el paradero de C.D.M, del que se teme que, tal como afirman que comentó a su padre, haya tratado de quitarse la vida en algún campo cercano.

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