Provincia

Decenas de personas lo pierden todo en un incendio en las chabolas de Lucena del Puerto

  • El fuego arrasa medio centenar de infraviviendas en el Camino de Santa Catalina

Kamale y Hasna ante los restos de su infravivienda, ayer.

Kamale y Hasna ante los restos de su infravivienda, ayer. / Rafa del Barrio (Lucena del Puerto)

Las llamas arrasaron ayer de nuevo el asentamiento chabolista del Camino de Santa Catalina (ya lo hicieron en enero de 2019), en Lucena del Puerto, donde malviven decenas de personas que se buscan la vida en las explotaciones agrícolas de la zona.

Por causas que por el momento se desconocen y que la Guardia Civil investiga, el fuego se declaró en torno a las 3:00 de ayer, cuando la mayoría de los habitantes de esta ciudad de plásticos y madera –reducida ahora a cenizas– se encontraba descansando.

Medio centenar de infraviviendas se vieron afectadas por el siniestro, que desató el pánico en el asentamiento hasta tal punto que un hombre y una mujer tuvieron que ser atendidos in situ "por aturdimiento y nervios", tal y como expresaron los efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Huelva al 112 en su informe.

El servicio de emergencias de la Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta había movilizado previamente a Cruz Roja, la Guardia Civil, la Policía Local de Lucena, el Infoca y la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias.

En la hectárea de terreno afectada por las lenguas de fuego dormían a esas horas la pareja conformada por los marroquíes Kamale y Hasna. Los despertó el estruendo cuando tenían prácticamente encima las llamas. Ni siquiera les dio tiempo a recoger sus pertenencias. Se vieron obligados a huir "hacia la carretera" ante el peligro que suponían las bombonas de butano que plagan la zona.

Como explicaron ayer a Huelva Información, "lo hemos perdido todo, nos hemos quedado sin comida, sin ropa, sin los papeles y sin dinero". Se les quemaron hasta los 600 euros que tenían guardados "de cuando hemos estado trabajando".

El matrimonio sospecha que el fuego "ha podido ser intencionado", aunque serán los investigadores quienes determinen realmente qué o quién provocó el siniestro.

Hasna lleva dos años en Huelva, Kamal un año y medio. Ninguno de los dos tiene una situación regular, estaban en ello. Han trabajado en la campaña "uno o dos días en una finca y otros en otra, y así". Su historia, la de los que lo han perdido todo, se repetía ayer en cada rincón del asentamiento, entre el olor a quemado y la reducción a cenizas de lo poco que les quedaba para sobrevivir.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios