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Asaja cifra en dos millones de euros las pérdidas por la 'lengua azul'

  • La asociación considera que la ayuda de 102 euros por oveja muerta es insuficiente porque los ganaderos tienen que reponer buena parte la cabaña

Los ganaderos del sector ovino han dado la voz de alarma: la enfermedad de la 'lengua azul' no sólo ha causado ya la muerte de 30.000 cabezas de ganado sino que ha provocado pérdidas en el sector que se cifran en dos millones de euros. El presidente de Asaja, José Luis García-Palacios, lanzó ayer ante los medios de comunicación este mensaje, al tiempo que lamentó que el consejero Isaías Pérez Saldaña haya afirmado que a algunos ganaderos le ha tocado la lotería por las ayudas que concede la Junta de Andalucía por oveja muerta.

Según Asaja la grave situación por la atraviesa el sector ovino sólo es comparable a la que se produjo en el cerdo ibérico con la peste porcina africana, una situación desesperante motivada por una parte por la subida de los costes de producción y por un continuo descenso de los precios en el mercado desde hace varios años.

A esto se suma, en opinión de Asaja, las ayudas insuficientes de seis euros por oveja en explotación afectada y de 96 euros por oveja fallecida porque hay afectados que han registrado grandes pérdidas de ganado y tiene que reponer las cabezas reproductoras.

Según datos facilitados por García-Palacios, con la muerte de 30.200 ovejas en Huelva a causa de la 'lengua azul', sólo superada en Andalucía por Córdoba, la cabaña onubense se ha reducido a unas 190.000 cabezas, aunque vaticinó que el ganadero profesional continuará con su actividad porque su perfil es de una edad media alta y ya no tiene oportunidad de abandonar la actividad ganadera por otra.

García-Palacios resaltó que la bajada de los precios ha sido tal que en la actualidad un cordero mediano de unas dos arrobas (entre 22 y 24 kilos) se paga este año y en esta época a poco más de 50 euros, el precio más bajo en los últimos diez años, cuando en 1989 su precio era de casi 90 euros y el año pasado también era mayor, de unos 52 euros.

El presidente de Asaja insistió que la crisis del ovino se acentúa desde hace tiempo por el poco margen de beneficio que el sector obtiene y por el descenso del consumo, que viene avalado por una encuesta según la cual sólo el 4 por ciento de los interrogados se consideran forofos de la carne de cordero, mientras que el 44 por ciento reconoce que no le gusta este tipo de carne. Con todo, García- Palacios insistió en que la enfermedad de la 'lengua azul' es inocua al consumo humano.

Ante esta tesitura, Asaja solicita a la Administración el pago total de las primas ganaderas y los desacoplamientos, las ayudas agroambientales pendientes con una demora de tres años, la agilización del pago por animales muertos y la implantación del desacoplamiento total.

García-Palacios subrayó la importancia del sector ganadero para otros sectores y para evitar el despoblamiento de las zonas rurales, además de abundar en la necesidad de que el consumidor conozca la trazabilidad, la calidad y el verdadero precio de un producto tan importante en la provincia de Huelva, al tiempo que criticó que "algunos se estén lucrando a costa de los ganaderos".

En cuanto a la vacunación del ganado ovino dijo que se está produciendo desde los focos exteriores hacia adentro y que se sigue produciendo la muerte de cabezas de ganado, aunque algunas ya se han inmunizado de este último ataque del virus 1, uno de los más virulentos.

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