Aunque oficialmente la campaña comenzó el viernes, vivimos inmersos en periodo electoral desde finales del año pasado. Primero fue la convocatoria de las autonómicas, después llegaron las generales y ahora, como si del fin de fiesta se tratase, se cuentan los días para el 26-M, una jornada en la que todas las fuerzas políticas se juegan mucho en Huelva.

En el terreno de juego de la capital, hay nueve titulares que optan a la Alcaldía frente a los once que concurrieron en los pasados comicios de 2015. El actual alcalde, Gabriel Cruz, aspira a revalidar el mandato socialista, mientras que Pilar Marín encabeza una lista popular que quiere dar la imagen del cambio de ciclo en el principal grupo de la oposición.

En los últimos cuatro años, el PSOE ha gobernado en minoría con once ediles junto a los ocho del PP, tres de Cs, otros tantos de IU, uno de Mesa de la Ría y otro de Participa.

La campaña se espera intensa porque hoy más que nunca se presume una jornada electoral con resultados totalmente abiertos. Aunque la extrapolación de las generales al ámbito local deja fuera los partidos que concurren por primera vez (Independientes por Huelva, Creo en Huelva y Andalucía por Sí), sí da una idea de lo que ya se va cociendo en la cocina de las municipales. Con esa puntualización, el 26-M dejaría nueve ediles del PSOE, seis de Cs y cuatro de UP (Unidos Podemos), PP y Vox. Es orientativo, pero da muestras de lo que puede pasar.

Los populares se enfrentan a la difícil tarea de mantenerse como segunda fuerza, un puesto al que aspira sin titubeos Cs, mientras que Adelante Huelva confía en seguir con los cuatro concejales que suman actualmente IU y Participa. En esa línea se sitúa Mesa de la Ría, que entró hace cuatro años en el Ayuntamiento y ahora quiere repetir. Muy de cerca le sigue los pasos Vox, que apuesta por sentarse en el salón de plenos de la Gran Vía de la mano del expopular Wenceslao Font. Entran en juego también Independientes por Huelva (IxH), Creo en Huelva y Andalucía por Sí (AxSí) que ponen todo su empeño en poder salir.