desde mi córner

Luis Carlos Peris

Éramos pocos y parió la abuela

Con la que está cayendo en la guerra que mantienen los dos gigantes va y habla uno que jamás da explicaciones

ENJUTO y con calidad, Victoriano Sánchez Arminio fue un muy buen árbitro en sus años mozos y bastante menos bueno en esta hora en que le cabe la dirección de su estamento de siempre. Ya no sólo no se muestra magro de carnes sino con un sobrepeso tan acentuado que las 625 líneas no son suficientes para acoger su careto en las poquísimas ocasiones en que se digna aparecer ante las cámaras. Sin duda, esa omertá que propugna a su tropa le hace predicar con el ejemplo, de ahí que sea de la hermandad del ver, oír y callar hasta que su señoría decide lo contrario para irrumpir cual paquidermo en cacharrería.

Si el fútbol español no estaba lo suficientemente encanallado a cuenta de los agravios que mutuamente se lanzan los dos colosos, esos dos equipos que todo lo polarizan para que los demás sean cada día más comparsas, apareció Sánchez Arminio para, provisto del correspondiente bidón, echarle gasolina al fuego. El hombre que había hecho ominoso mutis cuando Casillas se metió con Fernando Teixeira y éste fue abordado por Mourinho en el párking del Camp Nou, se ha investido de dignidad pidiendo el fuego eterno para Piqué. Y que conste que el novio de Shakira se pasó tres pueblos al poner en duda la objetividad del nefasto Velasco Carballo.

Nunca debió Piqué, por mucho que muchos dudemos de esa cacareada objetividad arbitral, largar lo que largó por esa boca, pero tampoco el jefe de los árbitros debió interrumpir sus eternas vacaciones mediáticas cuando tan cercanos en el tiempo se aparcaron parecidas salidas de pata de banco. Con la que está cayendo este curso en que no se validan goles como el del domingo en San Mamés, sale un Iturralde para mostrar quince tarjetas en un partido normal y brama el Barça por los errores que cree que le alejan del título, el señor Sánchez Arminio debió haber optado por la prudente conseja de que calladito, su estado natural por cierto, está mejor.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios