Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Ultramar
Debido a la desgracia vivida en Valencia y Albacete estoy sin palabras. Mi más sentido pésame a todas las personas que están sufriendo las consecuencias de la Dana. Las imágenes que veo en la televisión parecen sacadas de una película apocalíptica; sentimientos de rabia, tristeza e impotencia me lideran sin saber cómo actuar ni qué decir.
Quizás haya sido esta semana mi columna más difícil de escribir porque mi cabeza está en el Mediterráneo y me parecía banal y sin sentido cualquier otro tema del que reflexionar para sacarle ese lado bueno que busco siempre cuando me dirijo a vosotros.
¿Cómo ha podido pasar? ¿Por qué no se avisó antes a la población de la alerta? ¿Por qué tardó tanto la ayuda en llegar? ¿Por qué algunas personas se aprovechan del desastre para lanzar bulos y estafar? ¿Por qué se habla tanto sin tener toda la información?
Opiniones que nadie ha pedido, altavoces de necios con muchos seguidores que sólo están empeorando la situación y echando más leña al fuego. Asegúrense de que lo que digan es importante y servirá para mejorar algo, para sumar y no para restar, si no, cállense.
Vídeos compartidos por las redes sociales desinformando a la población, falseando la verdad y manipulándola con fines políticos. Ya no sabemos qué creernos porque todo vale en el mundo digital. Mucho cuidado con la red de araña a la que contribuimos cuando difundimos alguna noticia que no es cierta. Pongamos todo en duda y busquemos fuentes fiables.
Sólo nos queda aprender de lo que pasó, porque no se puede dar marcha atrás. Eso sí, podemos ayudar desde la distancia y reflexionar sobre todo lo que ha pasado: puede que algún día nos toque a nosotros y si estamos preparados e informados puede que evitemos males mayores: o no, es muy difícil saberlo. Pero si puedo elegir, prefiero tener toda la información posible. Entonces:
¿Sabríamos cómo actuar en situaciones límite? Estoy segura que no; lo que sale en las películas no es real, no tenemos la fuerza ni el coraje del protagonista porque no pertenecemos a ningún servicio de inteligencia ni a ningún cuerpo especial de seguridad o de rescate. El miedo paraliza, los nervios bloquean y la impulsividad hace que tomemos malas decisiones: es que no se sabe, malas o buenas decisiones… Nadie está preparado para una tragedia tan grande como la que se está viviendo.
Karl Jaspers, filósofo y psiquiatra alemán introdujo el concepto de “situaciones límite” como un aspecto central de su filosofía. Con este término, Jaspers se refiere a experiencias humanas inevitables que nos confrontan con los límites de nuestra existencia y revelan aspectos profundos de nuestra condición como seres humanos. Son situaciones en las que nos encontramos arrojados y que nos obligan a mirar de frente la naturaleza de nuestro paso por esta vida.
“La esperanza no es la convicción de que las cosas saldrán bien, sino la certidumbre de que algo tiene sentido sin importar su resultado final”. Václav Havel. Os deseo un feliz jueves.
También te puede interesar
Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Ultramar
Cambio de sentido
Carmen Camacho
¿Bailas?
Su propio afán
Enrique García-Máiquez
Tarde de toros
Gafas de cerca
Tacho Rufino
La tasa single