El Puente

Victoriano / Ruigómez

La cuarta ensaladera de plata

AYER me vino a la memoria la famosa frase que acuñó Juan José Castillo, periodista de TVE que nos narraba, en blanco y negro, las gestas de los Santana, Arilla, Gisbert, Orantes y un largo etcétera de grandes tenistas. Aquel "entró, entró, la bola entró" pasó a la historia pero nunca acabó con la conquista de la ensaladera de plata que signa a los ganadores de la Copa Davis. De aquellas eliminatorias nos quedan gestas de Gisbert y la elegancia de Manuel Santana, padre y mentor de lo q ue hoy estamos viviendo. Del blanco y negro hemos pasado al color de los hermanos Sánchez Vicario, Bruguera, Berasategui, Ferrer, Verdasco, Feliciano López y el número uno Rafa Nadal. El color de la Davis ha hecho justicia a los que nunca pudieron levantar la ensaladera y deja bien claro que nuestros tenistas, hoy por hoy, como equipo, son casi imbatibles. La tierra es ya igual al cemento y otras pistas rápidas. Ahora, la Davis, en color, es nuestra.

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