Un regalo siempre es apreciado pero lo es mucho más cuando viene de un amigo entrañable y esa persona, además, es un consumado artista por el que siente un sincero afecto, respeto y admiración. Me refiero a José Bacedoni Bravo. Para cuantos le conocemos y estimamos fervorosamente en Huelva, que somos muchos, admiramos su trabajo intenso de tantos años al servicio de la creación artística, de perfecto diseño y técnica, Cada una de sus publicaciones, ya bastante copiosas, mos alegran y llenan de satisfacción. Incansable, infatigable, trabajador imparable e intenso, su ejecutoria colma toda una antología gráfica y artística realmente espléndida y encomiable. Siempre que vuelve nos sorprende con una nueva muestra de su vigorosa actividad creativa y su arte exquisito.

Y así ha sido una vez más con este bello regalo, sencillo en su formato y materialidad pero hermoso y oportuno por representar lo que puede ser un atractivo obsequio, un valioso recuerdo, además de enriquecer para el que lo posea, y aumentar su colección de obras y libros del autor. Que son ya muchos. Consiste en una pequeña carpeta ilustrada con un dibujo del convento de Santa María de La Rábida que contiene diez postales, que entre el casi incontable compendio de realizaciones de Pepe Bacedoni, cuya calidad es indiscutible, me parecen de lo mejor en este caso con un predominante de lo colombino, tan representativo de Huelva. Es de una factura magistral la plumilla del muelle de Riotinto, prueba excelsa de la minuciosidad del trabajo de su autor, de su precisión y dominio de estilo tan difícil y de tan cuidada ejecución. Las siguientes son el Monumento a Colón en la Punta del Sebo, la iglesia de San Jorge en Palos de la Frontera, la Universidad de La Rábida, el mismo histórico cenobio que figura en la portada, el logotipo, una alegoría gráfica del V Centenario del Descubrimiento del Nuevo Mundo, en un diseño muy peculiar en la obra de Bacedoni, la torre almenara de Punta Umbría, la Casa Colón, el Barrio Obrero y la bella fachada del Centro de Instrucción Comercial de Huelva.

Como fondo en la propia carpeta que contiene estas excepcionales plumillas se reproduce un texto que escribiera en su día para Pepe Bacedoni, la que fuera inolvidable alcaldesa de Palos de la Frontera, Pilar Pulgar Fraile, de grato recuerdo, en el que entre otros merecidos elogios para el artista, comienza afirmando: "José Bacedoni Bravo, Pepe Bacedoni como cariñosamente le llamamos reúne en su persona lo castizo de su nombre y lo italianizante de su apellido. Pepe es aquí y allá. Es ahora y siempre. Es andaluz y universal". Y termina "Pepe Bacedoni es un hombre de fe, en la mistad, en el trabajo y en el ancho mundo". En esta breve pero bellísima iconografía, en estas tarjetas postales, configura y reafirma el desbordante e intenso fluir de su pluma sobre el papel. Un trabajo en el que se vislumbra más que se adivina su inquebrantable amor por su tierra.