Solamente se ha necesitado una semana de confinamiento para llegar a algunas conclusiones. Una. Somos protagonistas involuntarios de una prueba piloto sobre la convivencia en la casa familiar. Dos. Va desarrollándose un estrés social como consecuencia de la incertidumbre. Y tres, se agudiza nuestra capacidad de observación y análisis.

Ya que es mucho el tiempo que le dedicamos a oír o ver nuevas noticias esperando más desgracias, ¿No estaría bien analizar el lenguaje verbal de los que tantas veces nos empeoran el día? Observen cómo dominan los políticos el uso de las conjunciones. Presten atención a sus manifestaciones de solidaridad ante la pandemia:

Pablo Casado manifiesta, visiblemente emocionado, la solidaridad de su partido con todas las medidas tomadas por el Gobierno, pero debiera haber actuado antes (la segunda oración niega a la primera).

Inés Arrimadas, por su parte, no tardó en mostrarse a favor de la actitud del Gobierno en cuanto a su papel en esta crisis, aunque no confía en todos los que gobiernan.

El exconsejero de Sanidad de la comunidad de Madrid, Sánchez Martos, presente en todas las tertulias conocidas y por conocer, insiste en que hacen falta más pruebas para los posibles infectados, sin embargo, es obvio que no hay suficientes.

Sánchez, como presidente del Gobierno, convoca a los presidentes autonómicos a una sesión virtual para insistir una vez más en la lógica unidad de acción de todas las autonomías. Se preveía una reunión breve y a modo de recordatorio; no obstante, se prolongó más de cuatro horas, con un Torra empecinado en conseguir el aislamiento total.

Urkullu, presidente del País Vasco, manifiesta (casi con mano en pecho), que cumplirá lo pactado con lealtad, aunque ve innecesario que el Gobierno central ocupe funciones de la Ertzaintza.

Juanma Moreno, presidente de Andalucía, respalda las medidas tomadas por el Gobierno, mas acompañadas de un extenso paquete de las medidas económicas que él mismo propone.

Impresionante el dominio gramatical de nuestra clase política ¡Qué repaso le han dado a las conjunciones! ¡Qué interesante exhibición de las adversativas! ¿Recuerdan? "La conjunción adversativa es la que enlaza dos oraciones estableciendo entre ellas una contrariedad u oposición". Olvidan que, si de solidaridad se trata, las conjunciones al uso deben ser copulativas, ya saben, las que unen, las que enlazan.

Y si el caso es usar adversativas, me quedo con la de Los Secretos: "En otro mundo, pero a tu lado".