Error fatal

Han pensado: si tu enemigo es Vox entonces lo voto para fastidiarte. Error fatal, señora

Parece que se ha acabado la teoría del voto útil. Decían los grandes partidos que no se votara a Vox porque era un voto perdido. Y no es que haya sido útil, es que es decisivo. Los cuatrocientos mil votos de Vox han sorprendido incluso a ellos mismos. Pero se veía venir. Yo he escrito aquí varios artículos señalando el irresistible ascenso en toda Europa de los partidos enemigos de las componendas y de los apaños de lo políticamente correcto, que siempre he llamado de lo imbécilmente correcto. La existencia de una sociedad descafeinada, light, tocinito de cielo y merenguita hace que se vayan por el sumidero la historia la cultura, los valores irrenunciables y el ser y estar en la historia de naciones, las europeas, que han conformado la civilización occidental. Nunca he tenido la menor duda de que lo de Vox iba a llegar, cierto es que no lo esperaba tan pronto. Pero es que hasta sus enemigos se han conjurado para este impactante resultado.

Dos mujeres han colaborado extraordinariamente en esta victoriosa irrupción de Vox en la política nacional, no sólo en la andaluza. La primera es la inefable señora vicepresidenta del Gobierno, doña Carmen Calvo. Esta señora ha dicho unas cuatrocientas veces que Vox es un partido anticonstitucional. ¡Señora! ¡Pero qué atrevida es usted! Forma parte de un Gobierno que se va a comer y a dormir con sujetos que quieren destruir la nación, secesionistas varios, terroristas de larga trayectoria algunos y comunistas de pura cepa otros y dice usted que los de Vox son anticonstitucionales. Sus amigos de gobierno quieren echar al Rey, quieren trocear España como una pizza, liquidar el Ejército, derribar el sistema social y económico que define la Constitución española y dice usted que Vox es anticonstitucional. De risa, si no fuera de pena. La otra mujer que ha sido inestimable en la victoria de Vox ha sido doña Susana Díaz, de todos conocida. Esta señora se ha dedicado a focalizar la campaña en Vox y con torpeza infinita seguía en las mismas en la noche electoral, en vez de hacer lo que tenía que haber hecho el domingo: dimitir. Cientos de miles de andaluces que querían jubilarla lo han tenido fácil. Han pensado: si tu enemigo es Vox entonces lo voto para fastidiarte. Error fatal, señora. Aprenda y fíjese en donde Vox ha sacado dos diputados: Cádiz, Málaga, Almería. Allí donde saben bien lo que es el desbordamiento de la inmigración ilegal. Si no quiere ver esto, así como la entrega de su partido a los partidos anti nación española, la próxima vez sacarán más votos.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios