De nuevo las efemérides queridas de Huelva. Nuevamente, el silencio pandémico para los festejos. Otra vez las lógicas medidas de seguridad sanitarias contra la propagación del virus. Resignación y esperanzas para el futuro. Sin las Colombinas agosto pierde su encantador principio de un verano esperado. Es su mes favorito, su mes lleno de historia, su mes de diversión popular, sus efemérides más grandes de sabor marinero que el pueblo sabe disfrutar, comprender y valorar en su aspecto recordatorio de la gran hazaña del Descubrimiento de América, donde nuestros antepasados fueron protagonistas y realizadores de la Gesta. Este año las Colombinas tendrán un pequeño ocio para los niños, gracias a ese parque de atracciones que el Ayuntamiento ha dispuesto en el conocido recinto junto a la ría del Odiel.

Las celebraciones populares, siempre masivas, suprimidas. Los actos oficiales colombinos también, como razonablemente cabía de esperar. Solo algunos eventos deportivos en la ría tendrán una actividad presencial en nuestro Real Club Marítimo de Huelva. Las celebraciones rabideñas que desde 1880 mantiene con tesón la Real Sociedad Colombina Onubense, también se suspenden en espera de mejores tiempo, a excepción de una privada celebración religiosa en el monasterio franciscano por parte de la junta directiva, en recuerdo de la partida de la Carabelas y en sufragios por aquellos marineros y miembros de la Sociedad fallecidos. Un año sin celebraciones públicas, donde la Sociedad Colombina ha mantenido sus contactos con el mundo hispanoamericano, publicaciones de libros y las obras de su sede rabideñas, en una completa restauración para la ubicación de su pequeño museo histórico, gracias a la ayuda siempre amiga del Ayuntamiento palermo. Huelva ha sentido un año más el vacío cultural veraniego de las celebraciones públicas, salvado en parte por algunos espectáculos, conciertos y homenajes. Se ha vuelto a repetir, aunque con menos intensidad, la línea que marcó la pandemia el año 2020 y todos confiamos que con las vacunaciones a tope, el empuje arrollador de la terrible epidemia vaya decayendo. Para los onubenses las Fiestas Colombina, en agosto, serán siempre su homenaje de carácter histórico y su fecha única de celebración, en un concepto distinto a otras celebraciones populares llamadas ferias y presentadas de otra forma. Pretender cambiar las fechas tradicionales por otras por distintas opiniones no es aceptable en cuanto a la tradición y ajustarse a la realidad de las efemérides que se exaltan y celebran con total beneplácito del pueblo onubense orgulloso del hecho memorable situado en estos mismos lugares marineros de la vieja Huelva. Estamos tristes un año más sin esa alegría de las noches de agosto junto a la brisa del Odiel, pero nuestras autoridades han hecho lo que debían en razones de seguridad sanitaria. Al menos sintamos la fecha histórica del 3 de agosto en el corazón. Por eso y para eso somos onubenses y de alma y espíritu marinero.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios