El recreativismo ha asimilado con gran naturalidad que se haya superado la cifra de los diez mil abonados. Pero es bueno contar que este número es un hito en la historia del club. Además es parte del proyecto de futuro del equipo. Más allá de los ingresos económicos que supone, tener la decena de millar de aficionados detrás es un revulsivo que merece la pena ser destacado.

Nunca ha vivido el club este momento de apoyo masivo más allá de las manifestaciones puntuales a favor de su supervivencia y de las tradicionales tertulias de bares de cada lunes.

En la década de los noventa, cuando el Recre peleaba por subsistir en Segunda División B, se llegó en una ocasión a los 10.000 espectadores en un encuentro, aquel ante el Real Jaén, tras una campaña impulsada por Huelva Información y José Luis Camacho Malo. Aquello fue una gesta y los más viejos del lugar lo recordamos como un día asombroso, vivido en el viejo Municipal Colombino.

Los dos mil quinientos, tres mil socios… eran las cifras que manejaba el equipo no hace tanto tiempo. Y hasta hace bien poco no se superaban los siete mil en Segunda División A.

Hoy, el Decano tiene diez mil almas que dicen que son del Recre y lo demuestran. Con dinero sobre la mesa. Más allá de la anécdota, es la base firme que va a llevar al club a la Segunda División A. Es impensable que este apoyo no tenga recompensa, a corto o medio plazo, si sabemos lo que se tiene entre manos y no construimos castillos en el aire.

Es por eso, una vez que ya ha comenzado la Liga y el balón ha echado a rodar, que resulta necesario repetir una y otra vez que aquello que podía ser una quimera se hizo realidad.