Recuerdo con añoranza aquella tarde en la que a Morante le preguntaron en pleno salón de actos de la Universidad de Huelva que qué opinaba de la redes sociales. Fue con motivo de un acto en el que el torero sevillano participaba como protagonista del ciclo Los toros por Derecho que un genial grupo de alumnos de esa Facultad habían programado con buen tino.

Con tan buen tino, que desde luego se echa de menos que no haya tenido continuidad dentro de un campus que siempre se distinguió por la diversidad y la libertad de temas a debatir.

Bueno, a lo que íbamos. Esa tarde, dentro de la corriente que imperaba en esos tiempos donde los matadores se habían abierto a mantener una imagen social dentro de internet Morante respondió que esa cosa de la web era "para los que toreaban poco". Evidentemente Morante no quería molestar a nadie sino dejar patente que no era lo que más le quitaba el sueño andar mostrando sus momentos a través de ninguna red social.

Me ha recordado aquel lance la noticia de que al sevillano le han cortado el pienso los de Twitter por enseñar lo bien que había estado en Algeciras dos tardes atrás. Bueno, en realidad a Morante no le cerrado nadie nada porque Morante anda huérfano de cuentas y direcciones electrónicas y ha sido uno de sus correligionarios quien ha sufrido ese azote de falta de libertad con el que los magnates de esos portales que tanto mediatizan nuestras vidas se despachan siempre hacia el toreo.

Morante anda enfrascado en otras cosas menos livianas como las de buscar 'experiencias religiosas' anunciándose con hierros diferentes. Lo ha hará en El Puerto con seis de Prieto de La Cal y lo volverá a resolver de nuevo cuando llegue la feria de Salamanca y se encuentre con los Galaches de Hernandinos. Créanme que es un soplo de torería, mando y diferencia dentro de una temporada que ha vuelto después de una pandemia cambiando nombres pero con el mismo corralito de siempre para resolver ferias repetidas en sus nombres. Morante está enseñando el camino de revitalizar esto. Sería bonito e importante que otros se fueran ando por aludidos.

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