El Íbex 35, el principal índice de la Bolsa española, cerró ayer con una subida del 2,46%, la mayor desde el 11 de agosto, impulsado por el empuje de Wall Street y por la posibilidad de que Estados Unidos apruebe un nuevo plan de estímulos.

El selectivo ganó 163,20 puntos y ha terminado la sesión en 6.791,5, con lo que recupera el nivel de los 6.700 puntos y se queda al borde de la cota de los 6.800. Sin embargo, en lo que va de año, el Ibex acumula un descenso del -28,88%.

En el Íbex, las mayores subidas correspondieron al grupo siderúrgico ArcelorMittal (11,28%) -que ha vendido sus activos en EEUU-, seguido por el Banco Santander (6,81%) y dos empresas relacionadas con el turismo: Amadeus (5,44%) y Meliá (5,25%).

En sentido contrario, sólo un valor cerró en rojo, Almirall, que se dejó un 4,21% tras anunciar su consejero delegado que abandona la empresa.

En el Mercado Continuo, destacaron la subida de Urbas (5,56%) y, sobre todo, el desplome de Sacyr (-20,02%) después de conocerse el nuevo laudo sobre el Canal de Panamá, que le obligará a pagar 84 de los 200 millones que tendrá que abonar el consorcio condenado.

El resto de plazas europeas también cerraron con fuertes subidas, del 1,46% en Londres, del 2,4% en París, del 3,19% en Fráncfort y del 2,47% en Milán.

El crudo Brent, de referencia para Europa, marcaba un precio de 42,28 dólares, mientras la prima de riesgo española subía hasta 76 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,242%, mientras que la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,1659 billetes verdes.

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