Muerte en Rompeculos, novela de intriga policiaca y cuarta obra de Federico Soubrier, ya está a la venta en las librerías. Su autor, sociólogo y escritor nacido en Madrid en 1958, llegó a Mazagón a los once años, donde reside. Allí estableció una fuerte vinculación con la mar, navegando y practicando actividades subacuáticas. Su primer empleo fue como socorrista en el camping Doñana y posteriormente trabajó durante veintiún años en el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial, ambos situados en las inmediaciones de la playa de Rompeculos, conociendo a fondo la zona donde se desarrolla la trama de esta novela.

Interesado por la problemática social, el autor escribió la novela Rumbo Alzhéimer. La Gran Aventura (mayo 2010), el ensayo A hostias con el maltrato. Cara y cruz de la moneda (noviembre 2011) y el relato Crónicas del Poblado Forestal de Mazagón (junio 2013). En la actualidad es colaborador habitual en diversos medios de comunicación.

En un contexto que intenta dibujar Mazagón, su geografía, su panorama político, sus gentes, sus costumbres y el devenir de sus vidas, Soubrier analiza la problemática social que viene causando en la costa desde hace años el que algunos grupos de inmigrantes organizados hayan optado por delinquir. En algunos casos con el empleo de una extrema violencia. Unos para sobrevivir y otros a fin de lucrarse. Soubrier plantea lo que pudiera suceder, por supuesto con tintes de exageración, en un futuro no muy lejano, en una localidad que debido a ser mancomunidad plantea problemas de competencia.

El fotógrafo Ricardo Leiva aporta a esta obra cien ilustraciones pasadas a negativo a modo de láminas, aportando un componente visual que guía la capacidad imaginativa del lector.