Crítica de Cine

El niño y el dinosaurio

'el viaje de arlo'

Multicines La Dehesa Islantilla, Cines Aqualon Puerto Huelva, CineVip Lepe, El Condado Cinemas 7, Al Andalus Punta Umbría y Cines Artesiete Holea Huelva.- Producción: Estados Unidos, 2015.- T.O.: 'The good dinosaur'.- Duración: 100 minutos.- Dirección: Peter Sohn.- Guión: Meg Le Fauve.- Música: Jeff Danna y Mychael Danna.- Montaje: Stephen Schaffer.- Intérpretes: Animación

Por estas fechas suelen llegar a las carteleras, y por lo general lo hacen para quedarse durante mucho tiempo, estas películas de dibujos animados o animación, porque diversas son las técnicas actuales al servicio del género, que cuentan con numerosos espectadores, sobre todo si tienen impacto en la grey infantil, durante las fechas festivas más inmediatas y, sobre todo, las vacaciones navideñas. Por ello El viaje de Arlo puede resultar muy fructífero en la totalidad de las salas onubenses de la capital y provincia.

Y refiriéndonos a la animación y hablando de viajes, uno no puede menos de recordar una obra maestra, El viaje de Chihiro (2001), del genial director japonés Hayao Miyazaky, que consiguió nada menos que treinta y cinco premios entre ellos el Oscar a la mejor película de animación en 2002, la segunda que lo ganó en esta categoría, instituido el año anterior. Por supuesto que El viaje de Arlo está lejos de igualar la notable calidad de la citada. El cambio es evidentemente técnico ya que los nuevos procedimientos tecnológicos proporcionan a esta especie de historia épica un realismo realmente extraordinario, creando en torno al mítico personaje del dinosaurio un entorno en el que los estudios de animación Pixar han logrado en ese aspecto una calidad destacable.

El film viene a dar respuesta de alguna manera a esa cuestión que pudiera plantearse sobre lo que hubiera pasado si el asteroide que cambió para siempre la vida en la Tierra no hubiera chocado con nuestro planeta y los dinosaurios no se hubieran extinguido. Es la sugerencia sobre la que especula esta historia cuyo protagonista, Arlo, un Apatosauro, timorato y alegre a la vez, lleno de bondad, tras un acontecimiento traumático que vive su familia, emprende un viaje alucinante teniendo como compañero inesperado a un humano. Con el niño, Spot, vivirá una experiencia llena de sorprendentes y emocionantes aventuras en las que conocerá, entre riesgos, peligros diversos, fenómenos naturales y el acoso de depredadores, a unos personajes divertidos y sentimientos ciertamente conmovedores.

Con todos lo elementos sentimentales para atraerse a un público generalizado y particularmente a los niños, los artífices de esta película con Peter Sohn en la dirección, han articulado un relato nada original pero suficiente para desarrollarlo en imágenes con una técnica impecable, enmarcada en paisajes de gran belleza inspirados en las montañas del noroeste de los Estados Unidos. Oregón, Montana y Wyoming, sugirieron esos pasajes de gran atractivo visual que sirven de fondo a un argumento de escaso interés en ocasiones y de cierta simpleza narrativa. Sin la brillantez de otras producciones de la antigua factoría de Disney, empeñada siempre en ciertos lugares comunes, la película podrá entretener y divertir a los más pequeños espectadores.

Quiroga

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