Multicines La Dehesa Islantilla, CineBox Aqualon Puerto Huelva y Al Andalus Ayamonte y Punta Umbría.- T.O.: 'Legion'.- Producción: Estados Unidos, 2009.- Duración: 104 minutos.- Dirección: Scott Stewart.- Guión: Scott Stewart y Peter Schink.- Fotografía: John Lindley.- Música: John Frizzell.- Montaje: Steven Kemper.- Intérpretes: Paul Bettany, Dennis Quaid, Lucas Black, Tyrese Gibson, Kevin Durand, Kate Walsh, Adrianne Palicki, Charles S. Dutton, Willa Holand, Doug Jones.

Si la obsesión apocalíptica siempre fue redundante en la cinematografía, especialmente en la originada en Hollywood, últimamente se reitera el tema de manera insistente. Tenemos muy cercanas la películas The Road: La carretera (2009), de John Hillcoat y El libro de Eli (2009) de Albert y Allen Hughes, pero podríamos citar muchos más ejemplos a propósito de esta persistente obstinación. Y en esa tenacidad fatalista se repiten escenarios y tramas en forma de thriller fantástico enmarcado en la América profunda con personajes de índole muy conocida y las reminiscencia bíblicas ya habituales.

Se invoca aquí a San Mateo, para algunos el primero de los evangelistas, cuando de manera irreverente se supone que Dios se ha hartado de los comportamientos humanos -habría suficiente razón para ello- y envía una legión de ángeles convenientemente armados para provocar un Apocalipsis demoledor. Antes una premonitoria aparición de pequeñas epidemias, invasiones de insectos, arañas humanas y zombies, adelantan la hecatombe. Sólo parece que pueden salvarse un grupo de tipos extraños reunidos en una cafetería en un lugar innominado del desierto de Mojave.

Una apartada cafetería se convierte en el insólito campo de batalla por la supervivencia de la raza humana. Cuando Dios pierde la fe en la Humanidad, envía a su legión de ángeles para desatar el Apocalipsis, apoderándose de los cuerpos. La única esperanza de los humanos está en un grupo de extraños atrapados en una cafetería en medio del desierto. En ella trabaja como camarera Charlie, embarazada de ocho meses y cuya criatura podría salvar al mundo. Allí recala para proteger su nacimiento el arcángel Miguel que ha desobedecido la decisión divina. Sobre ellos se cierne siniestramente el arcángel Gabriel y sus implacables fuerzas exterminadoras, sobrenaturales y aniquiladoras.

La realización de Scott Stewart, encabezada por un reparto que en principio puede deslumbrar al espectador, nos conduce a un alucinante relato de ficción teológica, verdaderamente disparatado, increíble y absolutamente delirante con una propuesta narrativa que propende al desatino y la contradicción. Y no sólo por lo insensato de la argumentación sino por la baja entidad del guión y la irregularidad en el trabajo del realizador, que, junto a escenas rodadas con brillantez, hay secuencias de resolución demasiado rutinaria y donde a los personajes, creo que por el desconcierto de sus intérpretes, les falta una total convicción, como si no acabaran de entender bien su cometido.

Hay, en suma, una especie de mezcla de cine catastrofista y de muertos vivientes, lo cual parece ir bien a Scott Stewart, especializado en efectos especiales ya que trabajó para la poderosa factoría del sector Industrial Light and Magic, lo cual se aprecia en numerosos pasajes de la película. Una vez más se cuenta con las increíbles oportunidades que los efectos digitales han permitido a esta peculiar cinematografía. En este caso para un tema digno de mejor causa. Otra vez será.