'paranormal activity: dimensión fantasma'

Cines Artesiete Holea Huelva.- Producción: Estados Unidos, 2015.- T.O.: 'Paranormal activity: Ghost dimension'.- Duración: 95 minutos.- Dirección: Gregory Plotkin.- Guión: Jason Pagan, Andrew Deutschmann, Adam Robitel y Gavin Hefferman.- Fotografía: John Rutland.- Montaje: Michel Aller.- Intérpretes: Chris J. Murray, Brit Shaw, Ivy George, Dan Gill, Olivia Taylor Dudley, Chloe Csengery, Jessica Tyler Brown, Don McManus, Clara Pifko, Rebecca Larsen

Digamos en principio que el estreno en Estados Unidos de esta película en vídeo de pago por la red casi al mismo tiempo que en las salas de cine, ha provocado la consiguiente polémica. En cierto modo resulta lógico ante una saga que ha contado desde su primera aparición en la pantalla con un notable éxito comercial. Estamos ante la sexta entrega y, como se esperaba, su llegada a la cartelera ha despertado la misma atención que las anteriores, especialmente entre los amantes de este tipo de cine de intriga y terror. La polémica que aludíamos ha aumentado el predicamento del film especialmente en los cines estadounidenses.

Poco cambia el panorama argumental de esta sexta entrega con respecto a las anteriores. Un diseñador de videojuegos se muda a una nueva casa con su hermano, su mujer y su hija. Entre las cosas que han dejado en la mansión los anteriores inquilinos encuentran una cámara de vídeo y unos viejos vídeos. En ellas los nuevos ocupantes pueden ver unas imágenes que siembran pronto su alarma e inquietud. Dos niñas, Kristi y Katie, que habitaron la casa antiguamente aparecen en ellas.

Las que el espectador -me refiero a las imágenes que se proyectan las pantallas de los cines- está condenado a ver espacios vacíos, paredes y estancias desiertos y una acción congelada. Pasos adelante y atrás de una vacuidad exasperante con sustos mínimos y distantes, golpes de efecto por otra parte perfectamente previsibles. Cabe preguntarse si eran necesarios cuatro guionistas para una historia tan simple. El guión es tan deplorable que no acierta a manejar con destreza la fórmula del llamado found footage, mientras que la cámara manual supone para el público un auténtico suplicio mareante cuya visión acaba resultando totalmente obsesiva. Con todo ello los planos no pueden ser más caóticos. Siendo la más cara en presupuesto de la serie, es la más decepcionante.

Aseguran que es la última entrega de la saga. Debiera serlo a juzgar por este soporífero capítulo pero no me lo creo. Es algo que suelen decir los productores de estas interminables sagas. Tal vez para interesar a sus incondicionales. Basta que esta entrega funcione medianamente en la taquilla para que los productores vuelvan a las andadas y los espectadores adictos a estas paranormales experiencias, sigan admirándolas. Hay gente para todo.