Eme, como conocen sus amigos a Emeterio, se muda a Sevilla para vivir con su abuela tras la muerte de su padre. Ese traslado será el germen de la intensa y fantasmagórica trama de amor adolescente que sacude las páginas de El efecto Transilvania, la cuarta novela negra de Juan Ramón Biedma (Sevilla, 1962).

Publicada por Roca Editorial, esta obra es "un intento de aproximación al desorden psicológico de un chico esquizofrénico", explica Biedma, quien durante años simultaneó su actividad como locutor, guionista y crítico de cine y televisión con su trabajo en el servicio de gestión de Emergencias. Las consultas que allí gestionó son la fuente de este proyecto. "Recibíamos todo tipo de llamadas, con fabulaciones de lo más variado; y siempre me preguntaba si no habría algo detrás de esas fabulaciones que no partiera por completo de la nada", explica el autor.

En El efecto Transilvania, la inocencia del protagonista -que emprende una cruzada particular para rescatar a Peña, la compañera de clase por la que se siente atraído- contrasta con la maldad y el amor con la violencia. Fantasmas, ahorcados, atávicos autos de fe, cometas negras y animales nocturnos pueblan esta obra, donde el paisaje local nunca llega a desdibujarse del todo, como sucede con el inmenso paraje de chabolas inspirado en El Vacie.

El efecto Transilvania se localiza en la Sevilla que había caído en un tranquilo sopor tras finalizar la Exposición Universal de 1992. Cuenta el periodo que transcurre entre el primer brote de esquizofrenia del protagonista, que lo sufre a los catorce años de edad, hasta que se produce el segundo, mientras que al final de la novela se comprueba cómo todas esas visiones y experiencias suyas no carecen de contacto con la realidad.

Para documentar la obra, el autor entrevistó a varias psiquiatras, si bien aclara que el argumento "es todo mentira". Su libro de cabecera en este proyecto fue Las voces del laberinto, del periodista y escritor Ricard Ruiz, basado en quince testimonios reales de enfermos de esquizofrenia.

Según Biedma, el perfil de su protagonista respondería al de "esquizofrénico paranoide con síntomas productivos", en alusión a la capacidad de estos enfermos de crear su propio mundo.

El año que viene, Roca Editorial publicará su próxima novela, El humo en la botella, que es la contiuación de ésta aunque el punto de vista ya no será el del protagonista sino otro exterior. Además, Juan Ramón aguarda la publicación de su primera novela gráfica.