Cultura

'Resistencias', una panorámica del recentísimo cine español

  • El festival de Sevilla coedita junto a la Hispalense el volumen colectivo de nuevos valores

Es la sección con vocación de semillero, abierta al futuro y a las nuevas formas de expresión, la que quiere servir de plataforma para los jóvenes que dan sus primeros pasos, principalmente, pero también para veteranos como Pablo Llorca -casi un clásico ya en este ciclo, ausente este año- o Adolfo Arrieta -éste sí presente, con Belle dormant- que han maniobrado siempre, por elección o necesidad, fuera del radar industrial. En su cuarto año en el SEFF, Resistencias ofrece casi una veintena de títulos que abarcan un amplio espectro de temas y registros.

Para tomarle el pulso a los nuevos creadores, con intención de aportar una perspectiva analítica a la actividad de esta sección, el SEFF, en colaboración con el Cicus, acaba de publicar La imagen resistente: Historias y estéticas del "otro" cine español, coordinado por Sergio Cobo, Alberto Hermida y Samuel Fernández. El volumen, a la venta en el festival a un precio de 10 euros, recoge ensayos académicos junto y entrevistas a los cineastas participantes el año pasado en Resistencias. La idea, dicen sus impulsores, es darle continuidad, seguir publicándolos tras cada edición para documentar estas nuevas tendencias y alentar el debate sobre ellas.

El libro se presentó ayer en un acto al que asistieron muchos de los autores presentes en la selección de esta edición. En ella caben ficciones como Marisa en los bosques de Antonio Morales (pases hoy, mañana y el jueves) o Los objetos amorosos de Adrián Silvestre(hoy y mañana). Son mayoría no obstante los títulos de naturaleza documental, o híbridos, más narrativos o más ensayísticos o más libres y sin ataduras de género, que se sirven de esa veta. Son los casos de Gabriel Azorín, que en Los mutantes (hoy último pase), un canto de amor al cine y a sus procesos de aprendizaje, propone una reflexión que trasciende ese oficio, dijo, para abarcar también una cuestión tan generacional y procelosa como es el "intento de encontrar un lugar en la España actual"; o Irati Gorostidi, a quien la decadencia del puerto de Pasajes, antiguamente el mayor de Guipúzcoa, le dio pie para detenerse a observar en Pasaia Bitartean (hoy y mañana) los efectos que el desmantelamiento industrial han tenido sobre el urbanismo y la vida cotidiana de esa comunidad. Sugerente es también la realidad que retrata Leire Apellániz en El último verano (hoy último pase).

Entre los medio/cortometrajes hay trabajos como los de los sevillanos Carlos Rivero y Alonso Valbuena (se proyectan en pases conjuntos mañana, el jueves y el viernes), codirectores de Ouroboros, presentada en el SEFF de 2014.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios