La buena noticia del tomo 22 de Las crónicas de Conan es que da aquí comienzo la larga e interesante etapa del guionista Jim Owsley en la colección. Owsley firmó los mejores episodios en ausencia de Roy Thomas, especialmente cuando los lápices recayeron en manos de Val Semeiks, no porque supiera ser fiel al espíritu de Howard, sino justo por lo contrario. Su Conan es muy distinto del original, pero rezuma coherencia e interés, posee un atractivo elenco de secundarios y presenta situaciones que se apartan de la aburrida fórmula de Fleisher y compañía. El tomo contiene los números 168 a 173 de Conan the Barbarian, todos de 1985, más los Annuals 8 y 9, uno del 83 y otro del 84. A destacar el primero de los anuales, dibujado por el estupendo Val Mayerik, y que cuenta con un cameo del mismísimo rey Kull.

Fleisher, Owsley, Buscema, Mayerik, Chan. Planeta DeAgostini. 232 páginas. 25 euros