Cultura

Alienígenas y 'freakies'

Multicines La Dehesa Islantilla y CineBox Aqualon Puerto Huelva.- Título original: 'Paul'.- Producción: Reino Unido y Estados Unidos, 2011.- Duración: 104 minutos.- Dirección: Greg Mottola.- Guión: Simon Pegg y Nick Frost.- Fotografía: Lawrence Sher.- Música: David Arnold.- Montaje: Chris Dickens.- Intérpretes: Simon Pegg, Nick Frost, Jason Bateman, Kristen Wiig, Bill Hader, Blythe Danner, Joe Lo Truglio, Sigourney Weaver, Joh Carroll, David Koechner

Una película con la firma de Greg Mottola como director como poco nos puede recordar películas como Supersalidos (2007) y Adventure land (2009), lo cual no le favorece mucho. Si, además, sabemos que los protagonistas de la película, los actores ingleses, Simon Pegg y Nick Frost, responsables de films como Zombies Party: Una noche… de muerte (2004), son los guionistas, supongo que las expectativas no pueden ser muy lisonjeras. Lo que nos encontramos después es una parodia que nos sitúa a medio camino de Encuentros en la tercera fase (1977) y ET (1982), entre otras referencias a título de ciencia ficción, muy en la línea de la clásica comedia freakie.

Un viajero espacial, Paul, se ha pasado sesenta años encerrado en una base militar ultrasecreta. Se ha dedicado a asesorar a los líderes mundiales sobre otros alienígenas. Cuando advierte que sus consejos ya no son necesarios y que su fin se aproxima inexorablemente, decide huir y subirse a la primera autocaravana que se detiene en las proximidades del destacamento militar en el Área 51. En el vehículo, afortunadamente, viajan dos terrícolas que están deseando rescatar y acoger a un extraterrestre que, como Paul, tenga dificultades.

En la línea de infantilización del cine por parte de muchos productores del momento nada mejor que utilizar una serie de guiños al género de alienígenas para contar con un personaje que tanto nos recuerda al de ET para homenajear en tono de broma a Steven Spielberg y de paso trufar la historia de pasajes de ciencia-ficción con aires desenfadados y a veces grosero. Todo ello propicia una comedia superficial con fulgurantes rasgos de humorada sarcástica con un trío en la cabecera del reparto capaz de protagonizar la ocurrente y redundante road movie, película de carretera, que siempre es un buen recurso para animar a un público complaciente, amigo de intrigas conspirativas.

Quizás esas frecuentes correlaciones con conocidas películas del género, contribuya a animar la narración con incisivas y aceradas muecas de burla a las telecomedias y adquiera a veces rasgos más adultos e ingeniosos, aunque sea sólo a ráfagas y con apariciones fugaces de algunos famosos para hacer el look más asequible a la mayoría. Como quiera que sea el invento resulta simpático, en ocasiones, igualmente para amantes de la subcultura popular y para simpatizantes de la farsa a cualquier precio.

Situaciones y personajes obedecen a una afición de director y guionistas por las películas de los años ochenta que divertirá sobre todo a los entusiastas de ellas y las series televisivas de esta especie. El guión resulta bastante irregular y la realización, notablemente insustancial. Lo mejor, los protagonistas,' que definen bien sus personajes.

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