La guerrilla de los Tigres Tamiles de Sri Lanka oponía el miércoles resistencia al avance de las tropas gubernamentales en nuevos combates al noroeste del país, lanzando incluso ataques suicidas, según el Ejército.

Los enfrentamientos causaron la muerte de al menos 50 civiles en el bombardeo del miércoles en un refugio que oficiaba de hospital en la zona del conflicto, informó un médico a la AFP.

"Por lo menos 50 personas murieron y más de 60 resultaron heridas en el bombardeo", afirmó por teléfono T. Varatharajah, un doctor que trabaja en esta estructura médica en la minúscula franja costera donde están acorralados los rebeldes tamiles junto a decenas de miles de civiles.

Sin decir si el bombardeo fue realizado por el Ejército o por los rebeldes, el médico agregó que 47 personas murieron la víspera tras un ataque idéntico.

Los bombardeos causaron además la muerte de un empleado local de la Cruz Roja, indicó en Colombo el Comité Internacional de la Cruz Roja.

Los Tigres Tamiles acusaron a las Fuerzas Armadas de Sri Lanka de haber bombardeado esa zona con baterías de artillería.