Existen gatos que debido a su apariencia u origen llegan a costar hasta casi 100.000 euros. Hoy, en Mascotíssimas, os enseñamos cinco de los gatos más caros del mundo. 

Gatos más caros del mundo

Gato de bengala

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El gato de bengala es una raza estadounidense, que se obtuvo a partir de un cruce entre una gata leopardo asiática y un gato doméstico ordinario. Es muy popular debido a su pelaje similar al de un pequeño leopardo. Como otros gatos, son una raza independiente que necesita mucho entretenimiento. 

El gato tiene un precio bastante alto: un bengalí cuesta entre 1.000 y 3.500 euros.

Peterbald

Peterbald

Tiene su origen en Rusia y surge de una variante entre un gato siamés y el gato esfinge. Su personalidad es muy extrovertida, lo que le lleva a maullar y emitir sonidos roncos muy curiosos para llamar la atención. Estos animales, al carecer de pelos, necesitan una serie de cuidados especiales para protegerse del frío y del calor o de las infecciones que le pueden entrar en los ojos por carecer también de pestañas. 

Esta confiada e inteligente raza de gato cuesta entre 1000 y 2.500 euros.

Savannah

Savannah gato

El gato savannah es un híbrido de un cruce entre un serval africano salvaje y un gato doméstico. Debido a su tamaño imponente y al llamativo pelaje, el savannah parece un pequeño guepardo doméstico. Sin embargo, las primeras generaciones del cruce traen consigo una gran cantidad del comportamiento original de los gatos salvajes. Por lo tanto, en muchos países se requiere de un permiso oficial especial para la tenencia de animales salvajes.

Su aspecto es de lo más exótico gracias a sus grandes orejas, gran cuerpo y pelaje marrón y dorado con manchas. Llega a medir hasta 1,20 metros y es de las razas de gato más grande reconocido. 

El precio de este gato oscila entre los 6.000 y 30.000 euros, lo que la convierte también en una de las razas más caras del mundo. 

Caracat

Caracat

El caracat es un gato híbrido resultado de un cruce casual en un zoológico de Moscú entre un caracal y un gato doméstico. Ahora se ha convertido en todo un negocio y, aunque valdría cualquier especie, hay un tipo de gato preferido para hacer este cruce con los caracales: el abisinio, debido a que los colores de estas dos especies son más parecidos. La alimentación también es similar. Tanto el caracat como el caracal comen las mismas cosas. Desde codornices, pollos y otros animales hasta hierba.

El problema de este gato es que resulta difícil de gestar porque deben unir a un caracal con una gata doméstica y por lo general prefieren comérsela. Además con el paso de las generaciones las familias los están abandonando porque ven que son peligrosos. El precio de estos felinos ronda entre los 6.000 y 9.000 euros. Los caracat cuestan varios miles de euros. Aunque pertenece a las razas de gatos más caras, hoy en día apenas se pueden conseguir de fuentes serias.

Ashera

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Se formó en un laboratorio de Estados Unidos a principios del siglo XXI, involucrando animales como el serval africano, el leopardo asiático y el gato común. El resultado fue este animal que destaca por su increíble y peculiar belleza. El gato ashera es estéril ya que solo puede reproducirse en el laboratorio que lo creó.

Han llegado a pagar hasta 96.000 dólares por un ejemplar (aunque los precios oscilan desde los 17.000 hasta los 96.000 dólares). Aquí os hemos enseñado un artículo sobre Ashera, el gato más caro del mundo.