Estos vehículos tienen como objetivo el traslado de todo el material y las diferentes analíticas que se usan o recogen en los diferentes centros asistenciales, tanto hospitalarios como de Atención Primaria.La distribución es la siguiente: el Distrito Huelva-Costa y Condado-Campiña recibe 4, el Área de Gestión Sanitaria del Norte, 5; el Juan Ramón Jiménez 3 y el Infanta Elena 1. Es el mismo número de vehículos que con el que ya se contaba pero, tal y como reconocieron los responsables del SAS en la provincia, su renovación era imprescindible dado el estado de algunos de ellos. El hecho de que el Área de Gestión del Norte (AGN) sea el ámbito con mayor dotación se explica por ser una zona en la que hay que cubrir grandes distancias y en la que la diseminación de la población es mayor. El responsable de la AGN, Servando Baz, resaltó el trabajo de los celadores-conductores y destacó que todo su trabajo se rige por un riguroso protocolo.

La renovada flota pondrá en conexión a los más de 120 centros asistenciales con los que cuenta la provincia de los que 50 tienen un carácter más neurálgico que precisa de mayor dotación de material.Para llevar a cabo la renovación se ha optado por la fórmula de renting, que permite disponer de nuevos coches reduciendo los costes de mantenimiento, reparaciones, etcétera y que a su vez de unas mayores garantías de seguridad a los profesionales que los usan de forma habitual. La partida económica invertida es por un plazo de cuatro años, lo que garantiza la inmediata renovación de la flota.

Otras medidas promovidas en el seno de la Estrategia de Renovación de la Atención Primaria es la ampliación de las plantillas de profesionales, la incorporación de nuevos equipamientos tecnológicos (ecógrafos, equipos de radiología...), la mejora de las infraestructuras sanitarias, la formación de los profesionales en la realización de pruebas diagnósticas, el ajuste de los cupos en función del perfil de los pacientes o la recuperación de los equipos básicos de salud, formados por médicos de familia y enfermera. CSIF por su parte, señaló, a través de su delegado Eleuterio Velázquez, que esta formación venía reivindicando desde hace cuatro años, la renovación de la flota ya que los vehículos han tenido, como mínimo, una vida de 15 años. Velázquez añadió que “hicimos una evaluación de riesgos que presentaban y el estado de buena parte de ellos era lamentable ya que no contaban con manos libres, tenían asientos rotos y en uno de los casos incluso tuvo una rotura de frenos”. Aunque Velázquez se congratuló de que “por fin se haya hecho la renovación, ésta no ha sido en tiempo y forma” pero quiso dejar bien claro que quien “demandó la situación en la que estaban los vehículos ha sido CSIF”.