Los trabajos de la nueva lonja de pesca de Huelva se centran en los últimos detalles, especialmente en el equipamiento interior y en la urbanización del entorno. Comienza la cuenta atrás para la apertura de unas instalaciones que serán las primeras de un plan mucho más ambicioso expuesto en sus líneas principales por el presidente de la Autoridad Portuaria de Huelva, José Luis Ramos, empeñado en otorgar a las capturas de la flota de Huelva de una marca diferenciada.

Las obras cumplen los plazos previstos y lo que comenzó el mes de julio del año pasado, está a punto de ser una realidad en unas semanas. Apenas quedan los últimos envíos de equipamiento interior, así como la puesta a punto de equipos informáticos y de gestión que deberán hacer las instalaciones onubenses, las más modernas entre las andaluzas destinadas a las mismas tareas. Por fuera, los detalles de los edificios y el puesto de control, parecen listos para recibir los elementos que les concederán una personalidad propia.

Quedan algunos detalles de los espejos de la fachada que completarán una imagen nítida y que no supongan la creación de una pantalla visual que choque con las primeras intenciones de sus creadores. Los muelles de carga para los vehículos de los compradores, están listos para su uso; las escaleras interiores están casi terminadas y únicamente detalles como los circuitos de refrigeración, imprescindibles en unas instalaciones de este tipo, quedan pendientes de su conexión definitiva. En el exterior, la superficie está a la espera de recibir una última capa de asfalto una vez finalizados los trabajos de canalización de toda la zona.

Las instalaciones cumplen a rajatabla las condiciones que el Puerto de Huelva busca para aplicar cualquier iniciativa del denominado proyecto Puerto-Ciudad, es decir, combinar la vertiente profesional (evidentemente con las operaciones que se llevarán a cabo en sus instalaciones para el sector pesquero), la económica (con los negocios de ocio y hostelería que se crearán en torno a la misma, tales como bares y restaurantes que tendrán en sus cartas el pescado acabado de subastar) y ciudadano, ya que por primera vez y en unas instalaciones especiales separadas de las destinadas a la subasta, los onubenses podrán asistir a la venta de las capturas.

A estas obras, llevadas a cabo por la constructora Sando con un presupuesto cercano a los 7 millones de euros y que abarcan una superficie en planta superior a los 3.800 metros cuadrados, hay que añadir las que han comenzado en las inmediaciones y que verán a lo largo de los próximos meses, levantarse la Ciudad del Marisco. De momento, en el espacio previsto apenase ve la cimentación de los edificios que la compondrán y que han sido llevados a cabo por la UTE formada por Tecnología de la Construcción y Obras Públicas y Construcciones y Ferrallas La Rábida SL, que tienen un presupuesto previsto de 6,4 millones de euros y un plazo de ejecución de unos 10 meses, con lo que será una realidad antes de finalizar el presente año.

Se pondrán en marcha entonces las intenciones del presidente de la Autoridad Portuaria cuando anunció el pasado mes de noviembre que "estas dos instalaciones tienen que ser la gran imagen del pescado de toda la provincia de Huelva y deben convertirse en marca". Los planes que se llevarán a cabo para conseguir esta certificación de Pescado y Marisco de Huelva, se prevé consensuarlos con los representantes del sector pesquero de toda la provincia.