Huelva

Del Dique de la cabilla a la barriada de PESCADERÍA

  • Espacio ganado a la marisma La ciudad se fue acercando a la bajamar de la Ría cegando esteros, primero para el uso de las pesquerías y más tarde como una nueva barriada

Hay espacios donde la transformación urbanística no dejó ni rastro de lo que fue. Eso ocurre con la barriada de Pescadería. No existe ningún elemento que traslade a su origen. Si no queda nada de una época cercana, menos aún de finales del siglo XIX o principios del XX, que es cuando en verdad toma el sentido por lo que hoy se le conoce. Es la antigua pescadería, que se inicia con el muelle del Dique de la Cabilla, situado en el caño de mareas de este nombre y servía para el tráfico de las embarcaciones menores del puerto, que transportaban mercancías de cabotaje. Antes de la construcción del ferrocarril y muelle embarcadero de Río Tinto existían en esta zona unos esteros o cabillas, prolongaciones del caño referido que entonces comunicaban con el de las Metas y que servían para la construcción de embarcaciones de madera de regular porte, algunas para la Marina de guerra, de donde viene a este caño el nombre de Dique, con el que se le llamaba.

Cortada la entrada de los citados caños con la construcción del muelle embarcadero de Río Tinto, se abrió por esta compañía un cauce de 22 metros, enrasado el fondo al nivel de la bajamar.

Hasta el año 1883 se descargaban las embarcaciones menores en las playas mismas de los caños del Dique y en un ligero muelle formado por unos cuantos pilotes y unos tablones. Es entonces cuando la Junta del Puerto acuerda prolongar el muelle en 56 metros ante la demanda existente. En 1887 se amplía el muelle en cien metros lineales y la construcción de un tinglado de mercancías; lo más importante entonces es el terraplenado del dique de los Cabecillas, el de parte del dique nuevo, la prolongación de las atarjeas de la calle Monasterio (hoy Vázquez López) y de la Estación de Sevilla y la construcción de 1.350 metros cuadrados de acera afirmada en el camino que conducía de aquí a la Calzadilla (la actual Plaza Doce de octubre). Unas obras que concluyen en 1890.

Con el objeto de servir el tráfico de pescado se acuerda en 1892 la construcción de una rampa sumergible en la entrada del caño del Dique, paralelamente al mismo, de una longitud de 240 metros con un ancho de 8; una pendiente con revestimiento de piedra y una zona horizontal en la superior. Se deja entonces un espacio para Pescadería Municipal, en la entrada del Dique. Más tarde todo se cegaría, aunque continúa con la actividad relacionada con la pesca para dar lugar mucho después a la actual barriada de Pescadería.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios