Las playas onubenses pasaron en la jornada de ayer la primera prueba de fuego. El puente del Corpus hacía prever un aluvión de desplazamientos desde Sevilla, pero, por el momento, la costa de Huelva desprende tranquilidad. De este modo, la provincia contempló un tráfico fluido en los accesos al litoral, aunque con controles realizados por la Guardia Civil en las zonas de mayor tránsito, como los accesos a Matalascañas o Mazagón. Por contra, en Punta Umbría o en la zona de La Antilla apenas se registraron problemas a la hora de acceder a la costa.

El éxodo andaluz al litoral onubense dio comienzo ayer, aunque con una afluencia de personas que se sitúa por debajo de las previsiones, si bien es cierto que para el fin de semana se espera un notable incremento del número de andaluces que se refrescarán en las playas de la provincia. Así lo atestiguan las reservas en los negocios de hostelería, que han percibido "un importante aumento de clientes a raíz de la movilidad interprovincial".

En el restaurante Camarón aseguran que "manejan buenas previsiones de cara a los días de puente". Por ello, recomiendan a los clientes que reserven para jugar con dos turnos de comida. A raíz de la epidemia, este negocio de hostelería ha realizado ciertas modificaciones que van más allá del refuerzo de las medidas de seguridad que dicta el Ministerio de Sanidad. Una de las más destacadas pasa por concentrar el servicio de comida en términos de horario para "evitar las esperas y los almuerzos a las 17:00 como sucedía en años anteriores". 

En relación a la afluencia de clientes, desde el restaurante señalan a esta redacción que "ha crecido considerablemente el número de personas con la movilidad interprovincial", aunque el mayor incremento se espera este fin de semana después de que ""se haya contabilizado ya muchas reservas, sobre todo, desde Sevilla".

Control de la Guardia Civil en el acceso a Matalascañas.

Uno de los motivos que justifica un primer día que estuvo marcado por la tranquilidad en los accesos es la prudencia ante la posibilidad de que se produzcan aglomeraciones, por lo que se evita que los desplazamientos se concentren todos en la misma jornada. También influyó la meteorología. Pese a que el litoral contaba con unas agradables temperaturas que sobrepasaban los 20 grados, el viento afeaba el día de playa.

Aún así, grupos de otras zonas andaluzas ya se equipaban con el bañador y las sombrillas para disfrutar de la costa y de sus segundas residencias. Es el caso de la familia Román, procedente de Sevilla. Esta familia explicaba a Huelva Información que, con motivo del puente, llegaron el miércoles a Punta Umbría para "disfrutar de la costa, algo muy necesario después del estricto confinamiento". 

Además, la familia Román puso en valor la seguridad que les proporcionaba la localidad onubense, pues se cercioraba "del buen uso de las mascarillas de las personas y de la constante vigilancia en el municipio para evitar aglomeraciones de personas".

Ambiente en la costa durante el puente del Corpus.

La playa de Punta Umbría también se presumía como un espacio de desconexión para los más jóvenes. Así lo señalaba Gonzalo Cepero quien, acompañado de sus amigos, se había desplazado desde Sevilla para disfrutar de una segunda residencia durante el fin de semana.

Si bien es cierto que muchos visitantes disponen de una casa en la costa, también se contemplaban grupos que, tras el confinamiento, ansiaban pisar la arena y refrescarse en el mar. Beatriz Román, de Málaga, aunque residente en Sevilla, llegaba ayer a la costa de Huelva para disfrutar de un día de desconexión en la costa. En este sentido, la joven sostenía que se había interesado por un alojamiento en el litoral, pero manifestaba que hasta que no comience julio "la actividad turística no volverá a normalizarse".

La llegada escalonada de bañistas, por su parte, no obligó a la puesta en marcha de estrictos controles en las entradas de los municipios, aunque sí que hubo patrullas desplegadas que velaban por la seguridad de las personas que disfrutan de la costa. El puente del Corpus, que es festivo en Sevilla así como en algunas localidades, ha permitido espaciar los desplazamientos y desde la tarde-noche del miércoles están llegando viajeros a la provincia que en otras circunstancias se agolparían en la jornada de hoy. 

Los desplazamientos a las costas onubenses se harán más numerosos cuando todas las playas implementen sus planes de contingencia a partir del próximo 15 de junio, en tanto que para muchos se hace necesario un plan de seguridad con medidas excepcionales por la Covid-19.

Ambiente en la playa de Matalascañas.

Matalascañas, por su parte, es la única playa que ya se ha abierto al baño con su plan de contigencia, por lo que su cercanía con Sevilla y la puesta en marcha de tales medidas favorecen una mayor afluencia de andaluces. En este sentido, la alcaldesa de Almonte -municipio que gestiona Matalascañas-, Rocío del Mar Castellano, prevé un incremento poblacional en el fin de semana de 70.000 personas. Asimismo, en relación al primer día del puente del Corpus, la regidora municipal destacó "el comportamiento ejemplar de los bañistas y el refuerzo del dispositivo de seguridad en la costa con controles en los accesos".

Además, Castellano recordó a los usuarios de la playa las medidas recogidas en el plan de contingencia. Entre ellas, figuran la diferenciación de los espacios de subida y bajada en los accesos, el uso obligatorio de mascarillas en aquellos accesos donde no sea posible respetar la distancia mínima de seguridad de dos metros o la instalación de megafonía en los chiringuitos y puestos de socorro.

A ello se le unen labores de limpieza y desinfección cada tres horas en las barandas, accesos y cualquier tipo de mobiliario, así como de recogida de residuos para evitar acumulaciones de basura.