Tribunales

Una de las dos menores ratifica que fue agredida sexualmente

  • La otra joven "titubeó durante su declaración en numerosas ocasiones" y "llegó a admitir que las relaciones fueron hasta cierto punto consentidas".

Una de las dos menores que fue presuntamente agredida sexualmente por F.E.A., mayor de edad y con antecedentes penales, mantuvo hoy "de manera rotunda" durante la celebración de la vista oral su versión de los hechos, mientras que la otra joven "titubeó y señaló que las relaciones pudieron ser hasta cierto punto consentidas".

El juicio, que quedó visto para sentencia, se celebró a lo largo de la mañana de hoy en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Huelva y durante el mismo una de las menores defendió que fue agredida sexualmente por el acusado "hasta en dos ocasiones", razón por la cual la acusación particular solicita para el mismo 24 años de prisión --12 por cada presunto delito--.

Por su parte, y según dieron a conocer fuentes del caso, la otra menor implicada supuestamente en los hechos "titubeó durante su declaración en numerosas ocasiones, pues sigue manteniendo una relación de amistad con el procesado, con el que ya había mantenido relaciones sexuales, y no quiere perjudicarle", motivo por el cual "llegó a admitir que las relaciones fueron hasta cierto punto consentidas".

Estas mismas fuentes señalaron que durante su declaración el acusado defendió en todo momento su inocencia, aunque la Fiscalía, que representa a una de las menores, elevó a definitiva su petición de nueve años de prisión por cada uno de los tres presuntos delitos de agresión sexual agravados por penetración y una indemnización para cada una de las jóvenes de 6.000 euros por daños morales, mientras que la defensa pide su absolución.

Durante la vista oral en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Huelva prestaron declaración, además del acusado y las dos menores, su compañera sentimental, familiares de las jóvenes, los médicos forenses y el psicólogo del Instituto de Medicina Legal de Huelva.

Según indica el Ministerio Público en su escrito de conclusiones provisionales, el procesado se encontraba en estas fechas cumpliendo condena en la prisión de Huelva y clasificado en tercer grado penitenciario y régimen abierto, por lo que convivía con su pareja en un domicilio de la capital onubense.

Así, precisa que los hechos tuvieron lugar el 7 de abril de 2006, cuando las dos menores acudieron al mediodía al domicilio del acusado, "que el mismo año ya había mantenido relaciones sexuales con una de ellas, obligándola por la fuerza a ser penetrada vaginalmente".

Una vez en el interior del inmueble, el procesado "concibió la idea y el deseo de mantener con ellas relaciones sexuales, por lo que comenzó a hablar de temas sexuales, les enseñó revistas pornográficas y les dio de beber alcohol así como alguna 'calada' de los porros que consumía".

Sin secuelas psicológicas

Según explica el fiscal, "en un momento dado el acusado cogió a una de las menores y la llevó a un dormitorio, donde la sometió a tocamientos por todo el cuerpo y la penetró vaginalmente", todo ello "pese a la oposición de la menor, que gritaba y lloraba por el dolor que sufría". En este momento entró en el dormitorio la pareja del acusado, "que fue encerrada en la azotea para que no pudiese impedirle sus propósitos".

Posteriormente, el procesado llevó a la otra menor al sofá "y la penetró vaginalmente pese a sus gritos y resistencia", tras lo que liberó a su pareja "para que tranquilizase a las menores y las ayudase a vestirse, llevándolas en coche hasta las inmediaciones de sus domicilios y amenazándolas para que no contasen nada de lo ocurrido".

El Ministerio Público indica que ambas menores sufrieron una serie de lesiones físicas aunque, según el informe psicológico-forense del Instituto de Medicina Legal de 20 de mayo, no presentaban secuelas psicológicas referidas a estos hechos.

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