La soledad afecta a un número cada vez más importante de mayores. Según el director de la Sociedad Gallega de Servicios Sociales (ASERSO), Miguel Ángel Vázquez, el 37% de las personas mayores de 80 años "están solas", y son, en su gran mayoría, mujeres.

Según Vázquez, ponente en el seminario 'La soledad en los mayores: un nuevo reto en nuestra sociedad', España está "por debajo de la media europea en buena parte de los servicios de atención a los mayores", especialmente en lo que se refiere a teleasistencia, ayuda a domicilio y centros de día. Por este motivo, el ponente afirma que "no somos capaces de dar cobertura a las demandas que los mayores plantean", por lo que abogó por "implantar más recursos".

Siguiendo con su intervención, Vázquez valoró la importancia de la atención a los mayores, al tiempo que indicó que "una sociedad que cuida a sus mayores es una buena sociedad", pero que este colectivo no está siendo reconocido en el ámbito social. A su juicio, darle a los mayores "un motivo para vivir" es una iniciativa altamente positiva, puesto que "el mayor amainé tiene derecho a sentirse útil".

Para el ponente, "la soledad es un factor de riesgo para algunas enfermedades mentales", como la ansiedad, los trastornos de sueño o la depresión, patología que calificó como "la gran epidemia del siglo XXI". Esta soledad, según sus palabras, puede llevar a que estos individuos al consumo de sustancias tóxicas, como el alcohol o las drogas, lo que conlleva que estas personas tengan peores niveles de salud física y emocional. Según sus palabras, "no hay un completo estado de bienestar psíquico si se está solo".

Miguel Ángel Vázquez también apuntó que no es necesario que un individuo sea mayor para sentirse solo, pero que, a medida que se incrementa la edad de la persona, las condiciones económicas y de salud se van deteriorando. Para el ponente, sí es cierto que hay una mayor sensación de soledad cuando una persona vive sola que en compañía, "pero no todos los que viven solos se sienten solos ni todas las personas que viven en compañía se sienten en compañía".

A pesar de esto, el director de ASERSO resaltó que, "la sensación de soledad es una vivencia personal" que no tiene por qué tener una relación de tipo directo con estar solo. Esto se debe, en buena parte, a que, dentro de la propia familia, hay mayores que no tienen o no sienten la consideración que les gustaría tener, ya que "no son escuchados, no son atendidos o no son comprendidos".