Huelva

El incendio del Consorcio no impide la celebración festiva del nuevo año

  • Tras las campanadas los onubenses celebraron la entrada de 2008 en bares y fiestas privadas · La Guardia Civil sorprende a un individuo vendiendo artículos pirotécnicos en una furgoneta

Con cohetes y fuegos de artificio recibieron los onubenses el 2008, una tradición que se repite año tras año. Las tracas sucedieron a los brindis con cava o champan con los que se festejó la entrada del nuevo año. El cielo de la ciudad se llenó de luz y color segundos después de sonar las doce campanadas.

Tras la cena en familia y cumplirse el rito de las doce uvas, jóvenes y mayores continuaron celebrando la Nochevieja en bares, discotecas y en fiestas privadas. No se solicitaron en esta ocasión licencias para la celebración de cotillones en la capital onubenses, ya en 2006 el Ayuntamiento de Huelva sólo tramitó una de estas licencias. La jornada festiva transcurrió sin incidentes destacables. El incendio detectado la madrugada del pasado lunes en la discoteca Consorcio no impidió que se celebrara la fiesta organizada para despedir 2007. Las entradas para la misma habían sido vendidas con días de antelación.

Fuentes municipales informaron que el fuego se declaró a las 4.30 horas y afectó a la zona alta de la discoteca, donde se encuentran las oficinas y la cabina del DJ. Asimismo, indicaron que no se produjeron daños en la sala principal y de hecho se celebró la tradicional fiesta de Nochevieja.

En el incendio no se produjeron daños personales, ya que el establecimiento estaba cerrado. El fuego afectó a material de sonido, que tuvo que sustituirse, y al sistema de ventilación, según precisaron las mismas fuentes municipales. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron cinco efectivos del Cuerpo de Bomberos de Huelva dotados de dos camiones autobomba, que en veinte minutos extinguieron el fuego. Una vez sofocadas las llamas técnicos municipales y bomberos analizaron el lugar.

Los efectivos, que hasta el momento no han podido determinar las causas del incendio, inspeccionaron a fondo las instalaciones y comprobaron que no había impedimento para que se celebrara con normalidad la fiesta de fin de año. Desde el Ayuntamiento indicaron que este tipo de celebración no requería ningún tipo de licencia específica de Navidad al tratarse "de una fiesta privada para los clientes del establecimiento".

También se registró un incendio a las siete y media de la tarde del lunes en una vivienda de la avenida Italia, que fue sofocado rápidamente por los bomberos. Asimismo, los efectivos del Parque Municipal Contra Incendios tuvieron que realizar varias salidas para apagar, ya de madrugada, varios contenedores, que fueron objeto de actos vandálicos.

Por otra parte, agentes de la Guardia Civil sorprendieron en la mañana del día 31 a un individuo vendiendo todo tipo de artificios pirotécnicos, careciendo de las correspondientes autorizaciones administrativas y utilizando para ello una furgoneta que tenía estacionada en la vía pública a la que se acercaban personas de todas las edades, incluyendo menores. En el interior del vehículo, aparcado en la avenida Cristóbal Colón, fueron intervenidos 2.379 artículos entre petardos de gran potencia, tracas y cohetes, pertenecientes en su mayoría a la Clase III. Este hecho suponía un grave riesgo para la seguridad ciudadana, al utilizar la furgoneta a modo de almacén sin ninguna clase de control. Se da la circunstancia que el infractor es reincidente en este tipo de infracciones.

Ayer por la tarde, el Servicio de Emergencia 061 atendió a un niño de 6 años en El Terrón que sufrió heridas en una mano a causa de la explosión de un petardo.

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